BILBAO. En la reunión, han mostrado su rechazo ante "cualquier práctica o comportamiento que desde el ámbito empresarial o desde sus organizaciones representativas vulnere la legalidad y también la ética".
En este sentido, han lamentado el "injusto menoscabo" que para la imagen y la función empresarial suponen "actos como los que supuestamente se imputan al expresidente de la CEOE".
Asimismo, han subrayado el "contraste" de los mismos con la labor "callada, responsable y a menudo plagada de dificultades" que cada día realiza el colectivo empresarial vasco para crear, desarrollar y hacer "pervivir proyectos sólidos y de futuro que contribuyan al desarrollo de Euskadi y al bienestar de la sociedad vasca".