Por segunda vez desde 2009 la economía de la Eurozona está de nuevoen recesión. Según la primera estimación publicada ayer por la oficinaeuropea de estadística (Eurostat), los países del euro llevan dostrimestres consecutivos con números rojos. Retrocedió un 0,2% entreabril y junio y volvió a caer un 0,1% entre julio y septiembre lo quesignifica oficialmente ha entrado en recesión técnica. El modestoavance registrado por el núcleo duro de este club, que conformanAlemania y Francia, está detrás de esta negativa evolución. Sucrecimiento, del 0,2% del PIB, fue insuficiente para neutralizar losdatos de una España, Italia y Portugal que siguen hundidas en unprofundo agujero del que no consiguen salir.
Lascifras se conocen apenas veinticuatro horas después de una huelgageneral que sacó el pasado miércoles a miles de personas en toda Europapara protestar contra unas políticas de austeridad que, según laComisión Europea, son esenciales para devolver la estabilidad a la zonaeuro e impulsar el crecimiento. El problema, tal y como demuestran losnúmeros, es que no solo siguen ahogando a los socios del sur sino queesta evolución empieza a hacer mella en el conjunto de los países deleuro. De hecho, este club suma ya cuatro trimestres consecutivos sincrecer y muy pendiente de que ni Atenas, ni Lisboa, ni Madrid sedesvíen de la senda marcada.
En elcaso de la economía española, Eurostat confirma que el retrocesodurante el tercer trimestre de 2012 fue del 0,3%, una décima menos queen el período anterior aunque el Estado acumula ya una caída interanualdel 1,6%, tras cuatro trimestres seguidos con un signo negativo en sucasilla. Italia, otro de los países bajo la lupa de Bruselas, siguetambién en el ojo del huracán. Su economía se dejó dos décimas duranteel tercer trimestre, lejos del 0,7% que perdió entre abril y junio,pero con una tasa interanual que alcanza ya una contracción del 2,4%.Los números de Portugal también son descorazonadores aunque mantieneuna tasa de paro diez puntos por debajo de la española. La economíalusa cayó un 0,8% este último cuarto, tras el 1,1% que se dejó duranteentre abril y junio, lo que eleva la caída interanual al 3,4% en unaespiral muy similar a la que vive Grecia, país del que sigue sin haberdatos trimestrales aunque Eurostat sitúa ya su contracción del últimoaño en el 7,2%. También la economía chipriota sigue hundida. Secontrajo un 0,5% y suma una caída anual del 2,3%.
Cae Holanda Perono solo los países del sur tienen problemas. La crisis empieza a hacermella en el corazón de Europa y prueba de ellos son los datos pocoalentadores que llegan de Austria y Holanda. La economía austriaca, quehasta ahora se había mantenido inmune, cayó una décima entre julio yseptiembre, tras crecer un 0,1% el período anterior, mientras que laholandesa, otro de los países que con más ahínco defienden laspolíticas de austeridad, se dejó un abultado 1,1% con una contraccióninteranual que suma ya un 1,4%.
Coneste panorama, por mucho que Alemania y Francia, los dos países quetiran de Europa, siguen creciendo la debilidad con la que lo hacen esinsuficiente para contrarrestar la negativa evolución que vive lamayoría del continente europeo. En el caso alemán, su economía repuntóun 0,5% durante el primer trimestre del año, un 0,3% el segundo y un0,2% el último. Francia mucho más tocada por la crisis ha ido capeandola situación como ha podido: 0% durante el primer trimestre, -0,1% enel segundo y un 0,2% en el tercero. Un dato raquítico que, no obstante,mejora las previsiones internas de numerosos analistas que auguraban larecesión en el hexágono.
La evoluciónen el conjunto de la Unión Europea es algo mejor. El PIB registró uncrecimiento del 0,1% frente, a la contracción de dos décimas delperíodo anterior, gracias a la evolución de países como Reino Unido(1%), que creció cinco veces más que la locomotora europea, Eslovaquia(0,6%), Lituania (1,3%), Letonia (1,7%) y Estonia (1,7%). La tasainteranual entre los 27 muestra, no obstante, una contracción de cuatrodécimas.
Eurostat no el únicoorganismo que augura un final de año complicado. El Banco CentralEuropeo también revisó ayer a la baja sus previsiones de crecimiento.Según su boletín de noviembre, elaborado en base a las estimaciones querealizan expertos en previsión económica, la zona euro registrará esteaño una contracción del 0,5% para crecer el próximo año un modesto0,3%. "En opinión de los encuestados, el principal factor determinantede la revisión a la baja para 2012 es la persistente incertidumbre enla zona euro que se ha reflejado también en la debilidad de losindicadores económicos en los meses de verano y principios de otoño",señala el documento.