vitoria. El mensaje optimista del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, sobre la evolución de la economía española en 2013, con una caída del PIB del 0,5%, no es compartido en absoluto por la práctica totalidad de expertos internacionales, el Banco de España y la Fundación de las Cajas de Ahorros que duplican y triplican el porcentaje de reducción de la economía en España en el próximo ejercicio. Así, el panel de expertos de la Fundación de las Cajas de ahorros (Funcas) ha empeorado sus previsiones para 2013 debido a las expectativas más negativas de la demanda interna española, con lo que pronostica que la economía del Estado español se contraerá el 1,5%, -el triple que la cifra que el Gobierno de Mariano Rajoy ha puesto para elaborar los Presupuestos Generales del Estado-, y la tasa de paro se elevará al 26,1%.

El Banco de España también señaló que el próximo año el PIB español se recortará más que lo que afirma el Gobierno del PP, y estará más en línea con las previsiones de organismos internacionales como el FMI que señalan que el recorte será del 1,3% lo que deja al Gobierno español aferrado a unas cuentas presupuestarias para 2013 basadas en unas cifras de evolución de la economía en las que pocos creen.

Respecto a este año, los expertos de Funcas esperan una caída del PIB español del 1,6 %, una cifra algo menor de la pronosticada en un principio, gracias en parte al efecto del adelanto de las compras previo a la subida fiscal del IVA aprobada en septiembre.

Respecto al déficit público también existe coincidencia en señalar que, salvo medidas extraordinarias de recortes del gasto público, difícilmente se alcanzarán los objetivos pactados con la Unión Europea. Los analistas consultados por Funcas ven complicado que se pueda cumplir el objetivo del 6,3% del PIB para el conjunto de las administraciones públicas del Reino de España en 2012 y prevé que se situará en cotas del 6,9%, eso sin contar el impacto de las ayudas públicas a la banca, que lo elevaría un punto porcentual más. Con esta base tampoco prevén que se pueda lograr el objetivo del 4,5% del PIB en 2013 pues calculan que se situará en el 5,1%.

El Banco de España, por su parte, tampoco descarta que el déficit público supere el objetivo marcado para este año (6,3 % del PIB), algo que de darse podría obligar a adoptar medidas adicionales que permitieran su cumplimiento. En su último boletín económico, el antiguo banco emisor español reconoce que las medidas de consolidación extraordinaria que se adoptaron en julio aún no se han reflejado en las cuentas del Estado.

El impacto de estas medidas se notará en este último trimestre del año tanto por el lado de los ingresos, ya que la subida del IVA entró en vigor en septiembre, como por la parte de los gastos, puesto que la eliminación de la paga de Navidad de los empleados públicos tendrá efecto en diciembre.

En cualquier caso, el Banco de España considera que a día de hoy hay riesgos de desviación del déficit del conjunto de las administraciones públicas en 2012, sin incluir el posible impacto de las medidas de apoyo a la banca.

El Gobierno mantiene el objetivo de déficit para este año en el 6,3% del PIB, aunque ya ha calculado que se elevaría hasta el 7,4% si se incorporan las ayudas a la banca, pero las últimas informaciones señalan que podría estar ya en el 7,3% por el desvío de la Seguridad Social.

Con este panorama, no extraña que el miembro de la Ejecutiva del BCE, Benoit Coeure, recordase ayer al Gobierno español que el programa de compra de deuda puesto en marcha por la institución europea está "muy claro".