berlín. La canciller alemana, Angela Merkel, señaló ayer que es un deber del país hacer algo para reactivar la economía europea, y ha reconocido que para ello tiene en mente algunas medidas como una rebaja de impuestos en Alemania, que permita impulsar la demanda doméstica. Merkel recordó que el país ha podido superar estos últimos años bastante bien gracias a un aumento del consumo interno y aseguró que está haciendo todo lo posible para crecer y seguir siendo un buen motor para el resto de Europa.
"Pensamos que si nos encontramos hoy con un déficit público por debajo del 3%, ahora es nuestro deber hacer algo para reactivar la economía europea", añadió la canciller alemana, quien afirmó que hará todo lo posible para que vaya bien la demanda doméstica.
A este respecto, subrayó que si el país puede mantener un consumo interno bastante fuerte, esto también permitirá mejorar las importaciones procedentes de otros países de la Unión Europea.
Pero la crisis está agotando el empuje de la economía alemana, que apenas crecerá un 1% en 2013 por la recesión en el resto de la eurozona y el enfriamiento de la coyuntura global, estiman los principales institutos económicos de Alemania.
En su informe de otoño, que presentaron ayer en Berlín tras entregarlo a la canciller alemana, los institutos rebajan con ello a la mitad su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) alemán, que en la primavera todavía veían en el 2 % para 2013.