tokio. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, pidió ayer que se dé más tiempo a España, Portugal y Grecia para llevar a cabo sus ajustes fiscales, de modo de que puedan estabilizar sus economías. Con ello, se refirió a las exigencias de ajuste del déficit que están obligando a estos y otros países a aprobar subidas de impuestos mientras aplican duras políticas de recorte que al final repercuten en una drástica caída del PIB. Aunque Lagarde advirtió de que la zona euro requiere acciones "urgentes", abogó por dar tiempo a la consolidación fiscal en los países con más problemas.

En su primera rueda de prensa con motivo de las asambleas del FMI y el Banco Mundial que se celebrarán este fin de semana en Tokio, la directora del Fondo situó a Europa como el "epicentro" de la actual crisis, que en la actualidad "no solo afecta a las economías avanzadas". Por ello reclamó más tiempo para los estados con problemas. "Es lo que hemos abogado para Portugal, es lo que hemos abogado para España y es lo que estamos abogando para Grecia, donde dije repetidamente que eran necesarios dos años adicionales para que el país afronte realmente el programa de consolidación fiscal", subrayó. Lagarde reconoció en ese sentido que los diferentes gobiernos han tomado medidas para resolver la crisis de la deuda en Europa, pero destacó que "hace falta acción urgente, hay que hacer más y más rápido", indicó.

Esa podría ser una de las posibles salidas a la dura situación que atraviesa la economía española mientras el Gobierno español siga deshojando la margarita sobre la petición o no de un rescate a sus socios europeos. Rescate que según la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, el Ejecutivo no ha decidido aún si pedirá. A su juicio, el BCE está concretando aún el mecanismo de intervención en el mercado secundario de deuda por lo que entre tanto el Ejecutivo sigue trabajando en la consolidación fiscal y en las reformas estructurales.