Vitoria.LOS datos no engañan. En el Estado español buena parte de los trabajadores no se jubila a los 65 años de edad, lo hace antes. Mientras el Gobierno retrasa la edad legal de jubilación a los 67 años, -aunque algunos analistas consideran que por razones estrictamente económicas tendría que ser más tarde dado que la esperanza de vida ha subido considerablemente hasta los 78,8 años en los hombres y 84,8 años para las mujeres lo que hace una media de 81,8 años, según el INE-, la realidad es que la edad media de jubilación es de 62,8 años, según la OCDE.
La cifra parece baladí pero, en unos momentos en los que las cuentas del Estado no dan para todo abonar dos años más de jubilación -a 950 euros al mes que es la actual pensión media en España-, supone una cifra importante para las arcas públicas que ya gastan 120.000 millones de euros al año en pensiones. El Gobierno de Rajoy quiere modificar la normativa existente de forma que acceder a la jubilación antes de la edad legal tenga una penalización mayor que la actual y la desincentive.
Los técnicos del Ministerio de Empleo que dirige la ministra Fátima Báñez ultiman estos días una propuesta para reformar las modalidades de jubilación anticipada y parcial. Según las filtraciones conocidas se barajan endurecer las condiciones de acceso al retiro anticipado y el parcial podría hasta desaparecer. Adicionalmente, el Gobierno planea desvincular la revalorización de las pensiones del IPC.
Prácticamente una de cada dos jubilaciones que se registran en España se produce antes de la edad legal de retiro (65 años). La última reforma de la Seguridad Social tenía un doble objetivo: prolongar la edad de jubilación (hasta los 67 años en 2027) y acercar, al mismo tiempo, la edad legal de retiro y la real. ¿Se ha conseguido este último objetivo? La verdad es que no.
Los datos más recientes de la Seguridad Social muestran que entre enero y agosto de este año el 41,3% de los trabajadores españoles se jubiló antes de los 65 años. O lo que es lo mismo, más de 80.000 trabajadores accedieron al derecho a recibir una pensión pública antes de la edad legal de retiro. Curiosamente, lejos de reducirse ese porcentaje, como era el objetivo de la reforma aprobada hace un año, continúa creciendo puesto que la crisis está generando excedentes de plantilla en las empresas por la fuerte caída de la demanda lo que fuerza más trabajadores a jubilarse antes de tiempo.
El resultado es que en 2010, el 40% se jubilaba antes de los 65 años, en 2011 ese porcentaje había subido al 40,5% y este año ya estamos en el citado 41,3% de trabajadores que se ha jubilado de forma anticipada.
En teoría el endurecimiento de los requisitos para jubilarse antes de los 65 años vía coeficientes reductores, el porcentaje de su pensión que pierde un trabajador en función de cada año que acceda a jubilarse antes de los 65 años tendría que limitar el tema porque además la Seguridad Social recuerda que el porcentaje de jubilaciones con 60 años y coeficiente reductor se mantiene a la baja ya que solamente pueden acceder a esta modalidad los que fueron mutualistas antes de 1967, por lo que cada vez es menor la proporción de trabajadores que cumplen este requisito. Pero, por otro, se registran incrementos en el número de personas que acceden a las jubilaciones con coeficiente reductor de 61 a 64 años (un 12% de aumento); en los que llegan a la jubilación especial a los 64 años (su número crece el 16%), y en los que se benefician de una jubilación parcial (con un alza del 5%), que vuelve a subir después de las caídas de los últimos años.
Estas causas son las que explican que la edad media de las altas de jubilación en lo que va de año sea de 63,9 años, lo que supone un suave perfil ascendente. Es decir, cada vez hay más trabajadores que se jubilan antes de los 65 años aunque los que lo hacen tienen una mayor edad.
Por supuesto la generación que está accediendo ahora a la jubilación antes de los 65 años es la que se ha beneficiado de la mayor estabilidad en el empleo de la historia económica del Estado ya que se incorporaron a trabajar en los años 60 del siglo pasado, los del desarrollismo español. Ello hace que cuenten con 35 años o más cotizados.
El hecho de que más del 40% de los trabajadores se jubile antes de los 65 años no significa que estén en activo menos años de los que marca la ley para cobrar el 100% de la base reguladora (la variable que se utiliza para calcular la cuantía de la pensión). Según datos de la Seguridad Social, el 70% de las pensiones en vigor han cotizado, de media, más de 35 años dentro del régimen general. Como se sabe se aplican coeficientes reductores cuando no se llega a los 35 años.
¿Qué va a hacer el Gobierno?. Quiere endurecer el acceso a la jubilación anticipada. La última reforma de pensiones de 2011 ya elevó de los 61 a los 63 años el acceso a esta modalidad de retiro en el caso de que la jubilación sea voluntaria y no por causa no imputable al trabajador (despido). En este último caso se mantiene la edad de 61 años aunque se espera que lo suba hasta 63 años, a la vez que el porcentaje que se reduce la pensión si se jubila uno o dos años antes de los 65 se eleve.
En relación a la jubilación parcial, la propuesta del Gobierno español podría llegar a suponer su desaparición si hubiera consenso para ello en el seno del Pacto de Toledo. En la actualidad hay unos 120.000 beneficiarios, según el secretario de Estado de la Seguridad Social, que afirmó la pasada semana en una conferencia que la citada la jubilación parcial no está cumpliendo su función de transmisión de conocimientos entre la persona que se va de la empresa y la que le releva en el puesto de trabajo.
En opinión del dirigente gubernamental está siendo una forma "privilegiada de jubilación anticipada", cuyos costes está asumiendo la Seguridad Social. De acuerdo con las cifras aportadas, en 2011 la jubilación parcial acarreó para las arcas públicas un gasto anual de 2.704 millones de euros. A la vista de estos datos y de los problemas del Gobierno para cumplir con los objetivos de déficit público se entiende el interés del Ejecutivo del PP en atajar las jubilaciones anticipadas de forma que la edad real coincida con la edad legal de jubilación porque hoy en día la Seguridad Social tiene que afrontar el mantenimiento de una persona hasta casi 18 años teniendo en cuenta la esperanza de vida.
Pensionistas
l Jubilaciones anticipadas. Este año en el Estado español, con datos hasta agosto, el 41,3 de los trabajadores había accedido a cobrar la pensión pública de jubilación antes de los 65 años de edad. En total más de 80.000 personas ha pasado al retiro antes de la edad legal .
l Edad media. En el presente año de 2012, la edad media a la que acceden los trabajadores al sistema público de pensiones es de 63,9 años.
63,9
l Esperanza de vida. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la esperanza de vida en el Estado asciende a 81,8 años.
Fátima Báñez, ministra de Trabajo
El Gobierno quiere acercar la edad real de jubilación a la legal. Foto: P. Viñas
En lo que va de año,
la edad media a la que
se accede a la jubilación en el Estado español
es de 63,9 años
El Estado tiene presupuestados para hacer frente al pago de las pensiones 120.000 millones de euros