Berlín/Bruselas. El futuro del fondo permanente de rescate está pendiente del fallo de hoy del Tribunal Constitucional alemán respecto a las demandas presentadas por una alianza atípica entre izquierdistas, euroescépticos y defensores de la democracia directa, que consideran vulnera principios de la soberanía parlamentaria.

Los recursos contra el MEDE -Mecanismo de Europeo de Estabilidad- y el pacto fiscal quedaron vistos para sentencia ayer, después de que los jueces de Karlsruhe (suroeste) mantuvieran la fecha fijada del 12 de septiembre para dar a conocer su veredicto. El recurso de urgencia presentado el viernes por el diputado bávaro Peter Gauweiler, pretendiendo un aplazamiento de la decisión tras el anuncio de la compra de deuda soberana por el Banco Central Europeo (BCE), no alteró el calendario marcado por el TC.

Gauweiler, reconocido euroescéptico y "cliente fiel" del Constitucional, había sumado su procedimiento de urgencia a una demanda anterior, con el argumento de que la decisión del BCE, el jueves, había cambiado el escenario.

Este diputado de la Unión Cristianosocial Bávara (CSU), partido hermanado a la Unión Cristianodemócrata de Angela Merkel, pretendía detener la entrada en vigor del MEDE hasta que el BCE diera marcha atrás a su decisión, al considerar Alemania asume nuevos riesgos con la activación de la compra ilimitada de deuda.

La postura Gauweiler, un euroescéptico que recurrió al TC contra prácticamente todas las decisiones del Parlamento respecto a medidas de política europea, podría considerarse individual, aunque también es cierto que una mayoría de ciudadanos alemanes (un 54 %, según los sondeos) son contrarios a la compra de masiva de deuda.

El personalismo del diputado ha eclipsado algo la demanda firmada como Más democracia, la más numerosa en la historia del TC por los 37.000 ciudadanos que la respaldan y que impulsó la exministra de Justicia socialdemócrata Herta Däubler-Gmelin.

Las tres demandas principales fueron presentadas minutos después de que el Bundestag y el Bundesrat (Cámara baja y alta) ratificaran la aportación alemana al MEDE y el pacto fiscal, el 29 de junio pasado y por una amplia mayoría.

Con ello dejaron en suspenso la firma de ambos paquetes por el presidente, el independiente Joachim Gauck, y la entrada en vigor del MEDE, que debía haberse activado el 1 de julio. El argumento común de los demandantes es que el mecanismo vulnera los principios democráticos y recorta la soberanía del Parlamento.

bruselas Del fallo del TC alemán depende que España pueda ser rescatada por sus socios europeos y que se pueda crear una unión de supervisión única bancaria para la eurozona. En este sentido la Comisión Europea propondrá hoy encomendar al Banco Central Europeo (BCE) la supervisión de todos los bancos de la eurozona a partir de 2014, pese a la resistencia de Alemania, que quiere limitar el poder del supervisor único a las entidades sistémicas más grandes.

El objetivo de esta iniciativa, que será presentada por el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, en su discurso sobre el estado de la Unión ante la Eurocámara, es romper la espiral negativa entre deuda soberana y deuda financiera y avanzar hacia una unión bancaria.