VITORIA. El enfrentamiento entre los defensores de la generación eléctrica tradicional y los recién llegados de las solares deja entrever una pugna entre intereses enfrentados que pueden hacer que miles de millones de euros de posibles beneficios se inclinen en un lado u otro de la balanza en función de la regulación que apruebe el Gobierno español.

No hay que olvidar que los tres grandes grupos eléctricos, Iberdrola, Endesa y Gas Natural-Fenosa ya vieron reducir su beneficio conjunto un 22% el pasado año aunque obtuvieron unas ganancias de 6.341 millones de euros en 2011. Por su parte, las constructoras ACS, Abengoa y Acciona sumaron unos beneficios de nada menos 1.421 millones en un contexto económico poco favorable.

Con esta cantidad de dinero en juego se entiende que ambos grupos utilicen todas las armas a su alcance para hacer valer sus tesis ante el Ejecutivo. No es ningún secreto que las compañías eléctricas aprovechan el abandono de la política activa de profesionales ligados a los dos grandes partidos políticos del Estado, PP y PSOE, para fichar a personas que en un momento dado les puedan facilitar el acceso al Gobierno de turno.

Endesa tiene como asesor a José María Aznar, ex presidente del Gobierno español por el PP, y ha tenido al actual ministro de Economía, Luis de Guindos, como consejero. En Iberdrola fue noticia la incorporación como consejero del exministro de Justicia con el PP, Angel Acebes, y en Gas Natural está, además del expresidente español Felipe González, el que fuera secretario de Estado de Energía con el PP, Nemesio Fernández Cuesta.

En la denominada triple A además de contar con el propio presidente de ACS, Florentino Pérez, una de las personas que mejor se mueve entre las bambalinas del poder de los gobiernos de turno en Madrid, están personas relacionadas con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, hasta tal punto que en una reciente rueda de prensa se le preguntó si en su enfrentamiento con el ministro de Industria en el tema de la reforma energética influyen los intereses que puedan tener su hermano, Ricardo Montoro, y Ricardo Martínez Rico, hermano de su jefe de gabinete, en defender a las empresas de renovables. Ambos participan en una consultora, Equipo Económico -creada en 2006 por el propio ministro-, que tiene como clientes a Abengoa, empresa controlada por la familia Benjumea y a otros productores de energía solar. Naturalmente, Montoro negó un conflicto de intereses pero la reforma energética en España sigue en el aire.