MADRID. Los inversores también se resintieron del anuncio que hizo ayer el gobernador del BCE, Mario Draghi, de que la entidad rectora del euro no piensa comprar deuda soberana española.
A pesar de que los tipos de interés se encuentran en el 0,75 %, un mínimo histórico, el riesgo país de España se disparó ayer desde los 500 puntos básicos con que abrió hasta los 540 con que terminó el día, y tampoco ayudaron los elevados intereses que tuvo que acordar el Tesoro español en la subasta de letras a 3, 4 y 10 años que tuvo una enorme demanda.
El rendimiento del bono español se situaba en el 6,78 % a primera hora, similar al 6,77 % del día anterior, en tanto que el "bund" alemán tenía una rentabilidad del 1,39 % a esta hora, apenas una centésima más que el jueves.
En otros países de la zona euro Portugal caía a 877 puntos tras cerrar ayer en 878, en tanto que Italia subía hasta los 462, tras los 460 de ayer, y Grecia iniciaba el día en los 2.522.
Irlanda, por su parte, situaba su riesgo país en los 488 puntos tras regresar a los mercados con su primera subasta después de ser intervenida, en la que colocó 500 millones de euros al 1,8 %.
Los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares se cambiaban a esta hora a 475.370 dólares anuales.
En cuanto a los futuros, los que predicen el comportamiento de la deuda europea subían al 143,20 % desde el 143,12 % de ayer, en tanto que los que se contratan adelantando la trayectoria de la deuda estadounidense parten hoy del 134,03 %.