ATENA. De esta manera, usuarios privados podrán contratar los servicios de un agente por 30 euros la hora o de un coche patrulla por 10 euros la hora.
Según una circular ministerial, se podrán alquilar los servicios de la Policía para "escoltar explosivos o materiales peligrosos, objetos privados de gran valor, obras de arte y dinero" y también para el entrenamiento de fuerzas de seguridad privadas y para la participación en películas de cine o series de televisión.
La decisión se basa en una proposición legal aprobada el pasado mes de febrero -y que hasta ahora había pasado inadvertida- que permite cobrar por servicios que antes se ofrecían de manera gratuita, informa el diario "Proto Thema".
"No se trata de que cualquiera pueda coger el teléfono y pedir un policía de alquiler", matizó hoy una fuente policial en declaraciones a Efe en Atenas.
De hecho, la circular del Ministerio subraya que sólo se podrá requerir estos servicios "en casos específicos" y que "no estén sujetos a previsiones relacionadas con el orden público y la seguridad".
"Los pagos serán incluidos en el presupuesto estatal como un beneficio y serán utilizados para cubrir los costes del equipamiento y la infraestructura de la Policía Griega", señaló el Ministerio de Protección Ciudadana en su comunicado.
En los últimos años, y debido al elevado número de manifestaciones que tienen lugar en Atenas (una media de tres al día según cifras del Ayuntamiento capitalino), se han incrementado los costes de mantenimiento de las unidades antidisturbios.
En varias ocasiones, los medios griegos han informado de que las existencias de gas lacrimógeno de la Policía se habían acabado, lo que obliga a hacer constantes adquisiciones.
De hecho, el Ministerio de Orden Público contrató el pasado mes a cerca de 200 nuevos efectivos de "agentes especiales" para sus unidades motorizadas.