BILBAO. En 2010 cerraron en la CAV cerca de 2.800 empresas y muchas de ellas lo hicieron por problemas de esa naturaleza, según ha explicado la Cámara de Comercio de Bilbao en un comunicado.

Este programa establece una serie de medidas para evitar la pérdida de puestos de trabajo, de conocimientos y de capital económico que supone la desaparición de estas empresas y también ayuda a que los nuevos emprendedores incrementen sus posibilidades de éxito.

La Cámara de Comercio de Bilbao actuará como punto de encuentro entre las empresas se ven abocadas a cerrar y las personas que están dispuestas a darles continuidad, hará una análisis de la viabilidad de la empresa y buscará posibles compradores. Además el plan cuenta con una línea de apoyo financiero.