Donostia. Si Gipuzkoa dio un paso al frente en octubre y presentó su propio proyecto para un cambio tributario en respuesta a lo que consideraba una actitud pasiva de Álava y Bizkaia, la situación ahora es distinta. Así, los gobiernos de José Luis Bilbao (PNV) y Javier de Andrés (PP) han pactado conjuntamente una propuesta alternativa, que si bien contempla recuperar el Impuesto de Patrimonio que Gipuzkoa había puesto como condición indispensable para alcanzar un acuerdo a tres bandas, ha sido planteada en una forma que ha molestado al Ejecutivo foral.
Esta es la sensación que transmitió ayer la portavoz del Gobierno foral, Larraitz Ugarte, a las puertas de la nueva reunión que las haciendas vascas tendrán mañana en la sede vitoriana del Órgano de Coordinación Tributaria (OCT). En la misma, se abordará la "última oportunidad" para evitar la desarmonización fiscal en los tres territorios.
La portavoz guipuzcoana acusó a Bizkaia y Álava de haber "vetado" durante un mes la propuesta fiscal que Gipuzkoa transmitió al OCT en octubre para que realice el preceptivo informe previo a la tramitación parlamentaria, y de lanzar un "órdago" con su propuesta fiscal de última hora, que molestó a la delegación guipuzcoana. "El lunes enviaron sus propuestas una hora antes de iniciar la reunión del OCT. Sin tiempo ni para imprimirlas", apuntó ayer Ugarte.
Aunque las tres partes admiten que hay margen para el encuentro, Álava y Bizkaia lanzan el mensaje de que el grado de desarmonización que se produciría de no haber más acercamientos, no sería importante. Ugarte dejó claro ayer que "la armonización es buena para todos. Para todos", insistió.
La portavoz foral valoró que Bizkaia y Álava hayan decidido finalmente recuperar el Impuesto de Patrimonio -al principio eran reticentes- y que hayan presentado otras "propuestas que van en ese camino". "Entendemos que se están dando cuenta de lo importante que es. Ha habido un cambio por su parte en el último mes y medio, y creemos que todavía podemos cambiar un poquito más", apuntó.
Pese a las tensiones entre diputaciones, Ugarte considera abierta la opción de pactar el modelo fiscal. "Entendemos que si hay una reunión, hay una oportunidad de llegar a acuerdos, pero -añadió- no vamos a seguir teniendo más paciencia".
"Estamos preparados para negociar, para armonizar, pero no estamos dispuestos a aceptar el derecho a veto de nadie. Nosotros tenemos un camino marcado, basado en una política fiscal en la progresividad, en el que quien más tiene, tiene que pagar más. Hemos sido honestos, lo planteamos hace ya un mes. El OCT, si no ha hecho su informe, es porque ha tenido el veto de Bizkaia y Álava".
En este sentido, la portavoz aseguró que en el caso de que no fuese posible armonizar, el OCT tendrá que informar al respecto de nuestras propuestas de norma foral y seguir su tramitación. Lo que no puede ser es que dos instituciones tengan derecho a veto y que el OCT no pueda cumplir su función".
Ojalá haya armonización, ojalá haya acuerdos, pero, como siempre hemos defendido, nuestros principios van por delante. La armonización es algo interesante; una política fiscal progresista y de izquierdas es imprescindible y vamos a ir a ello. Estamos dispuestos a negociar, siempre y cuando nuestros principios rectores no se caigan".
"El tiempo del OCT ya ha pasado" Entre tanto, el diputado de Hacienda y Finanzas vizcaíno, José María Iruarrizaga, afirmó ayer que la armonización "no significa que las normas sean idénticas, sino que se parezcan en un porcentaje muy alto de aproximación". En su opinión, "si hay dos diputaciones que tenemos una norma básicamente idéntica y otra que no tiene nada idéntica, no sé quienes estarán más desarmonizados", ironizó.
Confirmó que la Hacienda vizcaína acudirá al OCT "las veces que quiera el Gobierno Vasco", que fue quien solicitó la cita de mañana, pero dejó claro que "el tiempo del OCT ya ha pasado para hablar de Patrimonio y de medidas", ya que Gipuzkoa ha trasladado a sus Juntas Generales sus proyectos de Norma foral. "Es allí donde deben producirse movimientos para aproximar y donde alguien tiene que poner las enmiendas", dijo. Asimismo, apostó por llevar a cabo un "análisis global del sistema tributario" el próximo año.