Los últimos acontecimientos de la crisis griega han obligado a los líderes europeos a desplegar una intensa actividad diplomática en Cannes, donde ayer trataron de forjar una nueva imagen de unidad antes del inicio, hoy, de la cumbre del G-20. "Los mercados están muy pendientes de lo que ocurra hoy en Cannes y de si los europeos serán capaces de afrontar el problema", dijo Alan S. Alexandroff, profesor de la Escuela Munk de Asuntos Mundiales, de Canadá, y experto en el G-20.
Aunque Grecia no forma parte de los 20 países industrializados y emergentes más influyentes del planeta, el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, fue ayer convocado en Cannes para dar explicaciones sobre el sorprendente anuncio de la convocatoria de un referéndum en su país. La estrategia de los líderes europeos es clara: forzar a Papandréu a preguntar en esa consulta (en caso de que se mantenga) no por el futuro del plan de rescate (como quiere Atenas) cino por el futuro de Grecia dentro del sistema del euro. La explicación, según los analistas, es que una consulta en esos términos haría que el problema dejase de ser del conjunto de la Unión Europea (obligada si no a renegociar otro plan de rescate) y pasase a ser el problema de un país que duda sobre su pertenencia a la moneda única.
El objetivo principal de la reunión entre los líderes europeos es que a su término puedan ofrecer una imagen de unidad que tranquilice a los mercados y permita al resto de líderes del G-20 continuar con su agenda prevista para estos días.
China y japón
A la expectativa
El primer paso lo dio ayer el anfitrión de la cita, el presidente francés Nicolas Sarkozy, en su reunión con el presidente chino, Hu Jintao, a quien se ha pedido un apoyo expreso de su país al Fondo Europeo de Estabilización Financiera (FEEF), al que se pretende dotar con un billón de euros. China de momento no ha concretado su apoyo, pero ayer mismo y a la espera de una resolución del problema griego, mostró su confianza en que la eurozona será "capaz de abordar las dificultades", según dijo Hong Lei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores. El portavoz indicó que China "seguirá siendo un importante inversor en el mercado europeo, además de estar dispuesta a encontrar vías con la UE que contribuyan a la solución de la crisis".
Japón también podría concretar en la cumbre de hoy su apoyo al fondo. Poco antes de partir hacia la ciudad francesa, el primer ministro nipón, Yoshihiko Noda, corroboró que Japón está preparado para adquirir nuevos bonos del fondo de rescate si así lo decide el Gobierno y lo corrobora un respaldo a la estrategia pactada por los líderes europeos la semana pasada.
Estados Unidos
Un problema europeo
Por su parte la Casa Blanca insistió ayer en que los europeos "han de permanecer unidos para salir de la crisis provocada por la difícil situación de las finanzas en Grecia". "Hemos repetido que Europa ha tomado importantes decisiones, y esperamos a una mayor elaboración y puesta en práctica de estas decisiones", afirmó Jay Carney, portavoz de la Casa Blanca en rueda de prensa.
En relación al reciente anuncio del gobierno griego de que someterá a referéndum la aprobación del segundo rescate financiero internacional, Carney se limitó a indicar que la iniciativa "sólo subraya la necesidad de que Europa se una tras una acción contundente que resuelva la crisis".