madrid. La vicepresidenta económica, Elena Salgado, se mostró ayer segura de que la emisión de bonos convertibles, en la que es muy activa la banca española, contabilizarán como capital de calidad bajo las nuevas exigencias de Bruselas. Esa es la prioridad del Gobierno español de cara a la cumbre de mañana ya que, según explicó Salgado, disminuiría considerablemente la cantidad de fondos necesaria para recapitalizar la banca española de cara a cumplir la exigencia de un 9% de capital de máxima calidad. Sólo el Banco Santander cuenta con una cartera de estos productos valorada en 7.500 millones de euros.

Según Salgado, de los contactos que ha mantenido el Ejecutivo español con la autoridad bancaria europea (EBA, en sus siglas en inglés) se desprende que los bonos convertibles contarán como capital de máxima calidad. En su opinión, dado que los bonos convertibles son activos que al final se convierten en acciones, tiene "todo el sentido que se consideren capital (de máxima calidad)".

Está por ver no obstante a qué bancos españoles afectará finalmente el nuevo requisito de un 9% de capital de máxima calidad, aunque se prevé que sean sólo a los más grandes: BBVA, Santander, Caixabank, BFA-Bankia, y el Popular.

último escollo A pesar de que no se ha anunciado un acuerdo de forma oficial para cerrar el plan contra la crisis de la deuda soberana, parece que en realidad la única cuestión que queda realmente abierta de cara a la cumbre de mañana en Bruselas es la ampliación del fondo de rescate europeo (FEEF), dotado de 440.000 millones de euros.

La canciller alemana, Angela Merkel, adelantó ayer en una reunión con los grupos parlamentarios de la oposición que la capacidad crediticia del fondo deberá superar el billón de euros, a través de un mecanismo que está todavía por definirse. Merkel aseguró que sólo quedan dos opciones de ampliación sobre la mesa: la primera prevé que el fondo temporal de rescate avale parte de las emisiones de deuda de Italia y España y otros países sometidos a la presión de los mercados, mientras que la otra consiste en la creación de un llamado "Vehículo de Propósitos Especiales" para atraer a inversores de China y otros países. Esta segunda alternativa podría partir directamente del FEEF o contar con la participación del FMI, una opción que hace pensar en la incapacidad de la UE para salir de la crisis por sí sola.

Otra posibilidad es combinar ambas propuestas: que el fondo actúe como aval del vehículo de inversión que se dedicaría a comprar deuda de los países en dificultades y a la vez intentaría atraer inversores. >efe/e.p.