Vitoria. Así lo ha reconocido el consejero vasco de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, tras la reunión del Consejo Vasco de Finanzas (CVF), en la que también se ha acordado que las diputaciones no tendrán que ingresar este año al Ejecutivo autonómico las cantidades recaudadas a las empresas que han tenido que devolver las ayudas de las denominadas vacaciones fiscales.

Estas cantidades se tendrán que devolver el próximo año al Gobierno vasco mediante la fórmula del porcentaje que fija la Ley de Aportaciones, es decir, el 70 por ciento de lo recaudado, a través de acuerdos bilaterales con cada institución foral.

Esta es la primera ocasión en la que se reúne el Consejo Vasco de Finanzas con la presencia de cuatro instituciones gobernadas por diferentes partidos políticos.

En el encuentro, que se ha prolongado durante casi cuatro horas, han participado, por parte del Gobierno vasco socialista, el consejero Aguirre, y la titular de Justicia y Administración Pública, Idoia Mendia, así como los diputados generales de Bizkaia, José Luis Bilbao (PNV); de Gipuzkoa, Martin Garitano (Bildu) y de Araba, Javier de Andrés (PP).

El debate sobre medidas fiscales no se ha tratado en esta reunión y se ha pospuesto para analizarla en el seno del Órgano de Coordinación Tributaria (OCT) con la intención de alcanzar un consenso amplio, tal y como ha reconocido Bilbao.

En la rueda de prensa conjunta ofrecida por el consejero y los diputados generales, Aguirre ha explicado que la previsión de recaudación de 2011, casi 800 millones menos que lo estimado hace un año, supone una bajada del 0,1 por ciento con respecto al cierre de 2010, aunque si se descuenta el dinero pagado al Estado por el IVA de Rover, un tercio de lo adeudado, hubiera aumentado un 3,8 por ciento.

Aguirre ha confirmado que los otros dos tercios del IVA de Rover se abonarán al Estado en los ejercicios 2012 y 2013.

En el CVF también se han ratificado las directrices presupuestarias del próximo año que orientan las políticas económicas, aunque no son vinculantes para las diputaciones, y que han sido calificadas por el consejero como "muy duras".

Así, Aguirre ha anunciado que en 2012 habrá una contención "absoluta" de los gastos de personal y una bajada de gastos de funcionamiento y subvenciones del Gobierno vasco.

El diputado general de Bizkaia ha explicado que el único punto de discrepancia del CVF de hoy entre las diputaciones y el Gobierno Vasco ha sido el referido a la prórroga de dos fondos, uno para infraestructuras y otro para inversiones en materia sociosanitaria, que el Ejecutivo regional ha decidido no prorrogar el próximo año, y que Bilbao ha cifrado en unas pérdidas para las diputaciones cuantificada en 66 millones de euros.

Preguntados por si la bajada de la recaudación de este año en relación a las previsiones iniciales va a afectar a la tesorería de los ayuntamientos, los tres diputados generales han respondido que la situación no es tan alarmante ni tan dramática como en otras zonas del Estado.

El diputado general de Araba ha mostrado su preocupación por la situación económica de este territorio que hará que los presupuestos del próximo año sean "extremadamente austeros".

Durante el CVF también han acordado las aportaciones provisionales de 2012 de las diputaciones al Gobierno Vasco, según el coeficiente horizontal, que han quedado establecidas en 8.496 millones de euros.