Roma/Madrid. Italia volvió a ver ayer cuestionada su solvencia financiera por la decisión de la agencia de medición de riesgos estadounidense Standard & Poor's (S&P) de rebajar la calificación de la deuda soberana del país de "A+" a "A" con perspectiva negativa.

S&P atribuyó su decisión a factores políticos y económicos y vaticinó que la tenue demanda externa, las últimas medidas de austeridad introducidas por el Gobierno y la "presión al alza en el coste de financiación del sector público y privado" conllevarán el "debilitamiento" del crecimiento económico italiano.

Con la rebaja de la calificación aplicada la noche del lunes, se confirmaron las advertencias lanzadas en los últimos meses por S&P, que ya había alertado de que en Italia se mantenían los riesgos relativos a su elevado endeudamiento, que se sitúa en torno al 120% de su PIB, es decir, más de 1,9 billones de euros.

Asimismo, los responsable de S&P señalaron durante una conferencia telefónica con analistas que el país transalpino corre un riesgo "razonable" de un nueva rebaja de su calificación en los próximos 12-18 meses si no vuelve a crecer con ritmo más constante.

Los dos planes de ajuste aprobados por el Parlamento italiano este verano (por valor de unos 79.000 y 54.000 millones de euros) con medidas destinadas a reducir los costes, aumentar la recaudación, sanear las cuentas públicas del país y alcanzar así el equilibrio presupuestario en 2013, fueron cuestionados por el FMI, que en sus previsiones indicó que el déficit italiano se situaría en el 1,1% dentro de dos años.

Además, S&P consideró que el objetivo de ajuste presupuestario del Gobierno italiano podría no concretarse por el debilitamiento de las previsiones de crecimiento, por el hecho de que dos tercios de ahorro dependen de aumentos de la recaudación en un país con una alta carga tributaria y dados los aumentos previstos en el coste que tendrá que pagar por colocar su deuda.

Tras la decisión de S&P, ahora se espera la de Moody's, que el pasado viernes anunció que prolongaba el periodo de revisión de la calificación de la deuda italiana, que ahora fija en "Aa2", para una posible rebaja.

rebote bursátil A pesar de la mala perspectiva para la ecnomía italiana, las bolsas europeas registraron avances de más del 1,5% empujados por los aparentes avances logrados entre el Ejecutivo griego y los representantes de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional para evitar la quiebra del país heleno. Así, al cierre de la sesión, la bolsa de Fráncfort subió el 2,88%; Londres, el 1,98%; Madrid, el 1,7%, y París, el 1,5%.

La Bolsa de Milán, pese a abrir en negativo debido al anuncio de S&P, logró remontar y cerró en positivo con un alza del 1,91%, hasta los 14.356,13 puntos.

Respecto a la venta de deuda soberana, el Tesoro Público español logró adjudicar 4.457 millones de euros en letras a 12 y 18 meses con un interés más elevado que los que aplicó en la anterior subasta, celebrada en agosto, con lo que se rompía una racha de cuatro subastas consecutivas con menores intereses. El objetivo de la emisión, que oscilaba entre 3.500 y 4.500 millones de euros, se cumplió ampliamente, y la demanda, que superó los 12.350 millones de euros, casi triplicó el importe adjudicado.