atenas. El Gobierno griego de Yorgos Papandréu se reunirá hoy miércoles para analizar el acuerdo sobre las medidas de austeridad que esperaba alcanzar tras una larga noche de negociaciones con la troika de supervisores internacionales de la UE, el FMI y el BCE en una teleconferencia que acaba de empezar.

Los jefes de la troika abandonaron el pasado 2 de septiembre Atenas de forma abrupta y sin haber elaborado un informe sobre los progresos de Grecia, demandando más celeridad al Gobierno en la aplicación de las reformas.

Según fuentes gubernamentales citadas por el canal privado ateniense Mega, la troika se concentra en la necesidad de que Grecia reduzca su abultado funcionariado y pide un inmediato recorte de entre 20.000 y 30.000 puestos de trabajo en el sector público.

La cifra total de los funcionarios en Grecia se calcula en unos 800.000, incluyendo a las empresas semiestatales. También negocian con el Gobierno griego recortar entre el 15% y 20% los sueldos y reducir las jubilaciones de forma que la más alta no supere los 1.700-2.000 euros al mes.

El objetivo es cubrir un agujero presupuestario de alrededor de 2.000 millones de euros que impiden a Grecia cumplir con su objetivo de reducir el déficit hasta el 7,6 % en 2011. Ese dinero es esencial para que Grecia pueda pagar sueldos y pensiones ya que la actual liquidez estatal no llega más allá de octubre.