Donostia. La Federación de Servicios Financiero y Administrativos de CCOO de Euskadi (Comfia CCOO) y las secciones sindicales de BBK, Kutxa y Caja Vital han denunciado la existencia de presiones sobre los representantes de este sindicato para que voten a favor de la integración en las respectivas asambleas general sin firmar el acuerdo laboral que reivindican y del que destacan, entre otros puntos, un plan de prejubilaciones y bajas incentivadas.

La denuncia a esta presión que es calificada como de "intolerable" se recoge en una comunicación interna que Confia CCOO y las secciones sindicales de este sindicato en las tres cajas vascas han dirigido a los trabajadores de las entidades para reiterar su posición sobre el proceso de integración y, de paso, disipar cualquier duda acerca de la posible existencia de divergencias entre la dirección de la central y algunos delegados de Kutxa que estarían a favor de la fusión.

Los delegados de Kutxa podrían haber conseguido una serie de mejoras laborales de calado, en donde no se recoge un plan de prejubilación por no ser importante para los empleados de la caja guipuzcoana, aunque si para los de BBK y Vital.

Los diez consejeros que CCOO tiene en Kutxa pueden ser decisivos para que la caja guipuzcoana se incorpore al proyecto, en el supuesto de que no se conformen otras mayorías que hagan prescindible su concurso. Una situación que si se produce en las asambleas de BBK y Cajas Vital, donde la mayoría de votos del PNV, PSOE y PP, serán suficientes para aprobar la integración. CCOO tiene en BBK diez consejeros y cinco, en Vital.

"Tratan de traspasar a los representantes de las plantillas, la responsabilidad de una operación empresarial, y esa no es nuestra función. CCOO defenderá, en primer lugar, los legítimos intereses de las plantillas que pasan necesariamente por la firma de un acuerdo laboral que dé seguridad, estabilidad y garantías", se asegura en el documento al que ha tenido acceso este medio. Ante esta situación, CCOO insiste en su comunicación en la inexistencia de un acuerdo que de la sensación de que este sindicato apoyará la fusión, por lo que rechaza cualquier responsabilidad ante un posible fracaso de la integración de las tres cajas.

"Para quienes piensan que todo está arreglado, reiteramos que si por tercera vez este discutible proyecto queda cojo tendrán que buscar la responsabilidad en quienes han decidido que cuestiones que se han acordado en todos los procesos de reordenación del sector no se puedan alcanzar en el caso de las cajas vascas. La pelota está en su tejado", advierte el sindicato liderado por Unai Sordo.

Para CCOO el acuerdo laboral que reivindica para dar su apoyo a la integración y en el que también participan los sindicatos independientes Pizkanaka y GIV es "razonable y acorde con la situación actual". En este sentido, enumera una serie de aspectos entre los que destacan garantías de estabilidad en el empleo, garantías y compensaciones adecuadas a la posible movilidad geográfica, una política coherente y sensata de prejubilaciones y bajas incentivadas para dar salida al excedente de la fusión, cierre de los actuales convenios, garantizando sus condiciones en el nuevo común y ordenación del horario laboral.

"Son cuestiones de toda lógica y sentido. No es un problema de prejubilaciones como algunos interesadamente pretenden", afirma.