París. 16 de las mayores fortunas y de los principales empresarios de Francia, incluyendo a la multimillonaria heredera de L'Oreal, Liliane Bettencourt, y a los consejeros delegados de multinacionales como Veolia, Danone, Total, Société Générale, Publicis, Orange, Air France-KLM o PSA Peugeot Citroën, firmaron una propuesta en la que solicitan al Gobierno galo que establezca una "contribución excepcional" que grave a las rentas más elevadas y colaborar así en el "esfuerzo solidario" necesario para respaldar el futuro económico del país.
"Nosotros, presidentes y directivos de empresas, hombres y mujeres de negocios, financieros... pedimos la instauración de una contribución especial que afectará a los contribuyentes franceses más favorecidos", expone la carta publicada por el semanario Le Nouvel Observateur.
"Esta contribución no es una solución en sí misma, por lo que tiene que formar parte de un esfuerzo más amplio de reforma, tanto de gastos como de ingresos", reconocieron en la misiva los promotores de la propuesta.