madrid. Los controladores aéreos en declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Madrid por la huelga encubierta del pasado diciembre alegaron que abandonaron sus puestos de trabajo los días 3 y 4 de diciembre al darse de baja médica por razones "psico-físicas" provocadas por el estrés de la situación laboral que vivían por los decretos aprobados por el Gobierno y negaron que estuvieran organizados para secundar un paro encubierto, que perjudicó a más de 600.000 personas en toda España.

La magistrada había citado ayer lunes a cuatro controladores, pero sólo comparecieron Ignacio B.D y Adolfina C. V. En total, deberán prestar declaración en los próximos meses dieciséis controladores por delitos de sedición y abandono de sus puestos de trabajo. El delito de sedición aérea, recogido en la Ley Procesal Penal de Navegación Aérea de 1964, y de conformidad con el artículo 20 de la Ley de Navegación Aérea, está castigado con penas de cuatro a ocho años de prisión y la inhabilitación especial para empleo o cargo público por ese mismo tiempo. Las comparecencias se producen en el marco de la investigación por lo ocurrido en el aeropuerto de Barajas entre los pasados 3 y 4 de diciembre cuando más de 50 controladores decidieron abandonar de forma masiva sus puestos, provocando que AENA ordenara el cierre del espacio aéreo y el Gobierno decretara el estado de alarma.

El primero en desfilar por el Juzgado fue Ignacio B.D., cuya declaración se ha prolongado por cerca de tres horas y en la que se negó a contestar a las preguntas de la acusación particular, según fuentes jurídicas. El imputado esgrimió que abandonó su puesto por razones psico-físicas debido al estrés producido por la tensión creada por el conflicto con el Gobierno. Por otro lado, Adolfina C. V. indicó que se dio de baja por la tensión que le había creado un incidente debido a un amago de accidente entre un helicóptero y un avión. Además, negó que participara en la reunión en Torrejón de Ardoz. Su abogado, Carlos Vila, reconoció que el estrés que tenía también se debía a la tensión que vivía el colectivo por la situación con el Ejecutivo central.

La Agrupación de Demandantes Afectados por el caos aéreo del pasado mes de diciembre presentará en las próximas fechas una demanda administrativa por daños y perjuicios contra AENA al entender que la empresa pública es "totalmente responsable" del "paro salvaje" de los controladores y que se podía haber evitado.