vitoria. La sociedad vasca no quiere que suban los impuestos, según datos del último sociómetro publicado ayer por el Gobierno Vasco. Si la reforma fiscal que presentará el lehendakari López en septiembre incluye un aumento de las principales tasas, las propuestas de cambio no serán bien acogidas por el 61% de los ciudadanos de la CAV, que también señala que dos tercios de la población creen que la situación de la economía en la comunidad autónoma es "mala o muy mala", por sólo un 29% que considera que es buena.
Tras las declaraciones del lehendakari en el pleno del pasado 24 de junio advirtiendo de "la necesidad de analizar la posibilidad de ampliar las bases imponibles y recuperar algunos impuestos si fuera necesario", el último Sociómetro dedica en sus páginas un apartado específico dedicado a la fiscalidad, a fin de comprobar cuál es la postura de los ciudadanos sobre este asunto.
Los resultados muestran un rechazo mayoritario de la sociedad vasca a una subida de impuestos, ya que un 61% piensa que se deben mantener las tasas actuales para continuar con los mismos servicios públicos. No obstante, Lehendakaritza ya ha puesto fecha para una propuesta de reforma fiscal. Será en el Pleno de Política General que se celebrará a finales de septiembre cuando dé a conocer al Parlamento cuáles son las medidas que sugiere en esta materia. Aunque López insiste en que aún "no hay una propuesta cerrada", las urgencias de liquidez del Ejecutivo vasco hacen necesario aumentar sus niveles de recaudación vía impuestos, lo que explica el interés del lehendakari por reabrir un debate en torno a la fiscalidad. A pesar de que los ingresos de las respectivas haciendas forales se mantienen constantes, Lakua acumula una deuda pública sin precedentes desde la transición que roza los 5.000 millones de euros, más del 7% del PIB de la CAV, tras multiplicarse por 5,6% en los dos años de mandato del PSE.
Las arcas de Lakua están semivacías y el plan de recortes que ya se ha puesto sobre la mesa no parece suficiente para enderezar la situación. Reducir el déficit "es necesario pero no suficiente", constató López el 24 de junio, día en el que anunció una posible subida de tributos básicos como el IRPF o el de Sociedades para salvar las finanzas públicas. El lehendakari también habló de "recuperar algunos impuestos si fuera necesario" como el de Patrimonio, que se calculaba sobre el valor de los bienes personales y que ya no está en vigor.
Según el Sociómetro del Gobierno, solo un 16% de los vascos son partidarios de pagar más impuestos para mejorar los servicios públicos. En el sentido contrario, un 12% cree que es necesario reducir la carga impositiva. Otros datos significativos en materia fiscal indican que más de la mitad de la población cree que en la CAV se pagan muchos impuestos y que recibe de las administraciones menos de lo que aporta. A este dato se añade que siete de cada diez personas consideran que el nivel de fraude fiscal es demasiado elevado.
el problema del empleo En lo que respecta a los problemas más graves para la ciudadanía, lo que más preocupa a los vascos (82%) es la situación del mercado de trabajo, seguido de la situación de la economía: el 55% cree que la coyuntura es "mala" y un 12% siente que es "muy mala". Sólo un 29% piensa que aún es "buena".