BILBAO. En ambos casos, la reducción de los precios fue inferior a la media estatal, del 3,5 por ciento en el primer trimestre y del 4,1 por ciento en la variación anual.
La caída en los precios de la vivienda se debió a la evolución negativa experimentada en el mercado de segunda mano ya que la vivienda nueva registró un ligero incremento en Euskadi.
En concreto, el precio de la vivienda usada se redujo un cinco por ciento en los tres primeros meses del año, mientras que la caída interanual se situó en un 5,7 por ciento. Por su parte, la vivienda nueva incrementó sus precios un 0,7 por ciento en el primer trimestre y un 0,2 por ciento en el último año.