Desde que estalló la crisis, el verano perdió sus fuertes efectos sobre el mercado laboral. Si antes de ella, la contratación estival aumentaba hasta un 20% con respecto al resto del año, esta época ya no consigue calentar el mercado con la misma intensidad. En el conjunto del Estado, el verano ofrecerá un 10% más de empleo que el resto del año.
Aun así, el verano seguirá siendo un revulsivo para la contratación y Adecco y Eurovendex esperan que ésta aumente un 10% con respecto a la media del resto del año en España. Esta cifra aumenta en aquellas zonas en las que el componente estacional juega un papel predominante en su mercado laboral, como las regiones más turísticas, con aumentos que pueden rondar hasta el 20% o 40%, como Andalucía y Canarias, respectivamente.
Sin embargo, aún quedan lejos las cifras de contratación estival de antes de la crisis. Desde 2008, el empleo temporal en estos meses ha ido sufriendo caídas encadenadas de en torno al 30%. No obstante, este verano que está a punto de empezar estará marcado por la moderación en la contratación y se prevé que los empleos crecerán en torno al 5% interanual a nivel estatal.
Entre junio y agosto
Unos 88.000 contratos más
Este verano se realizarán alrededor de 88.000 contratos entre junio y agosto, lo que supone una perspectiva moderada, aunque habrá regiones con expectativas muy superiores, como Baleares, donde la contratación puede crecer cerca del 50%, o las islas Canarias, con un 10% beneficiada por las revueltas árabes.
Por el contrario, las zonas turísticas de la Península no experimentarán importantes mejoras, ya que su contratación aumentará en torno al 5%. Este es el caso de la Comunidad Valenciana, Cataluña, Madrid y Navarra, donde la industria de componentes de automoción y el sector logístico liderarán la creación de empleo.
Aunque este verano no será fuente de empleo en todos los sectores, sí que lo será en algunos puntuales muy relacionados con el sector industrial. Serán aquellos que necesitan mano de obra intensiva debido a las campañas que en esta época se intensifican como la industria de componentes de automoción o la industria logística, y que utilizarán el empleo temporal para satisfacer el aumento de la demanda puntual que este periodo del año produce.
El turismo, fuente generadora de empleo en los meses de verano, dejará notar su influencia en zonas de costa principalmente, y en algunos puntos del interior. Sin embargo, en el País Vasco apenas dejará constancia en el repunte del empleo, ya que las empresas de hostelería harán frente a la campaña estival con el personal habitual de plantilla salvo contrataciones puntuales por exigencias de la demanda.
camareros y carretilleros
Los más demandados
A nivel estatal, para la hostelería y restauración serán los cocineros, camareros o recepcionistas de hotel con idiomas los más requeridos en los negocios de restauración y hoteles, mientras que los agentes de viaje, guías turísticos, animadores socioculturales y monitores de tiempo libre serán los trabajadores estrella del verano para las agencias de viaje, parques temáticos y centros de ocio.
Dentro del sector servicios, el aeroportuario contratará a mucho personal de facturación, mozos maleteros y recepcionistas de alquiler de coches. De la misma forma, los centros comerciales demandarán promotores, cajeros, dependientes, reponedores o montadores de cambio de imagen de establecimientos. Los perfiles de telemarketing seguirán siendo reclamados, mientras que las zonas de costa como Baleares o Levante lanzarán nuevas promociones, por lo que necesitarán gestores de punto de venta, promotores y azafatas, entre otras cosas. En el sector industrial, en cambio, se verá una mayor paralización de la contratación.
En Euskadi, en el sector industrial de la automoción y logística serán los mozos, carretilleros y peones especialistas. También habrá industrias que aunque registren un descenso de su producción en estas fechas, aprovecharán el momento para reorganizar su stockaje, actualizar inventarios o a realizar el mantenimiento y limpieza de la maquinaria y otras infraestructuras.
oportunidades veraniegas
No sólo para los jóvenes
El verano volverá a ofrecer nuevas oportunidades laborales para aquellos que están buscando un empleo. No sólo será una opción como tradicionalmente ha sido para los jóvenes, que aprovechan su periodo de vacaciones para conseguir unos ingresos económicos, sino que también lo será para los más de cuatro millones de parados.
Por lo tanto, el perfil del candidato que opta a los puestos de empleo veraniegos ya no es sólo el de un joven, sino que se suman otros, como las amas de casa, los inmigrantes, los mayores de 40 años y parados con elevada cualificación.
Otro verano más, el número de personas en búsqueda de empleo ha crecido muy por encima del escaso aumento de los puestos de trabajo. Hay que tener en cuenta que hay un 3% más de parados que en mayo del año pasado, es decir, 123.457 personas más buscando trabajo.
Dentro de estos nuevos trabajadores veraniegos, las amas de casa están jugando un papel importante ya que continúa su incorporación al mercado laboral; 170.000 amas de casa dejaron sus hogares para buscar un empleo en 2010, con el fin de aportar unos ingresos extras a la unidad familiar, afectada generalmente por la situación de desempleo de algunos de sus miembros.
Las personas mayores de 40 años, por su parte, uno de los grupos directamente afectados por los despidos masivos, también buscarán un trabajo, aunque sea de carácter eventual, para hacer frente a su situación en un momento en el que muchos de ellos no tienen ya derecho a la prestación por desempleo.
falta de ingresos
Formación superior
Otra diferencia importante con respecto a años anteriores es que mientras la contratación de inmigrantes en los meses de verano no representaba un incremento sustancial en este colectivo con respecto al resto de meses del año, ya que su prioridad era encontrar un empleo duradero que les otorgara cierta estabilidad en nuestro país, este año también optarán a todo aquello que consideren adecuado a sus posibilidades, dado que la falta de ingresos, como el resto de colectivos, les obligará a trabajar allí donde existan ofertas de trabajo.
Derivado de lo anterior, la formación de los trabajadores también será superior a la de años precedentes: en estos momentos la alta tasa de paro afecta por igual a personas con formación que sin ella, por lo que no sólo los estudiantes de titulaciones medias o superiores intentarán obtener ingresos en su periodo vacaciones, sino que también aquellos ya licenciados o diplomados, o con una dilatada experiencia profesional, intentarán hacerse un hueco para hacer frente a sus gastos.