El consejo de administración de Banca Cívica aprobó ayer por unanimidad el proyecto de segregación para traspasar al banco del grupo los negocios bancarios de las cajas que lo integran: Cajasol, Caja Navarra, Caja Burgos y Caja Canarias. Según un comunicado de Banca Cívica, en el proyecto no están incluidos los activos y los pasivos adscritos a la Obra Social, ni tampoco las acciones de las cuatro entidades. Para el grupo, éste es "un paso muy importante y decisivo" en su proceso de constitución como entidad bancaria, ya que pasará a ser el tenedor de "todos y cada uno" de los activos y pasivos de las cajas que lo forman, es decir, los negocios financieros y todos sus recursos humanos, técnicos y administrativos. Las cajas ceden en exclusiva a Banca Cívica la titularidad de sus signos distintivos -marcas, nombres comerciales y nombres de dominio- para todo el negocio segregado, pero los mantienen para sus obras sociales. Banca Cívica ha nombrado coordinador global de su operación de salida a bolsa al banco Credit Suisse.