Pello González acusa ahora a Cimiano de no combatir el fraude con "rotundidad"

Andrés goñi

vitoria. 24 horas después de que el diputado de Hacienda, José Luis Cimiano, acusara a su colega guipuzcoano, Pello González, de hinchar los datos referentes a la lucha contra el fraude en 2010 -"tal vez lo ha hecho por su afán de protagonismo", ironizó Cimiano, su homólogo en Gipuzkoa salió ayer al paso para defenderse y, de paso, responder con dureza al diputado alavés a través de un comunicado oficial.

Sorprendido por el "increíble" mensaje que éste lanzó el pasado viernes durante la presentación de los resultados de la lucha contra el fraude en Álava el pasado año, González lanzó su primera andanada haciendo hincapié en un asunto tan espinoso como el caso Miñano, causa judicial en la que están imputados varios miembros del PNV en Álava a los que se les acusa, presuntamente, de varios delitos de prevaricación, malversación de fondos públicos, falsedad documental en documentos públicos, privados o mercantiles y alteración de precios en concursos y subastas públicas. "Casos como éste o el de Bravo no se hubieran dado si hubiera existido un compromiso claro y rotundo para combatir el fraude y la corrupción", respondió González a su colega alavés. "Es todo un planteamiento ético del trabajo", continuó. "Cuando una institución tiene voluntad política para combatir esta lacra, los resultados normalmente acompañan", admitió.

En el caso de Gipuzkoa, el balance de la lucha contra el fraude permitió el pasado año un ahorro de 317,5 millones de euros, casi cuatro veces más que el registrado en Álava (81 millones). Esta circunstancia y las continuas preguntas de los periodistas sobre esta misma cuestión llevaron a Cimiano en su última comparecencia a interpretar los datos en clave electoral. "Las cifras están hinchadas, no son homogéneas; quizá obedezcan a la labor de inspección y gestión, distinta a la autodeclaración, porque no son comparables dada la magnitud de las cifras", sostuvo el viernes.

"No rindo cuentas a nadie" Acusaciones de este tipo no sentaron nada bien ni al propio González ni a su equipo de colaboradores. Por eso el candidato a diputado general en Gipuzkoa por Hamaikabat, formación con la que previsiblemente chocará el PNV en las próximas municipales del 22-M en este territorio, sacó pecho ayer al recordar a Cimiano que su departamento no rinde cuentas a nadie. "Los 317,5 millones de deuda aflorada hablan por sí solos; hablan de la voluntad y el compromiso adquirido en esta legislatura no sólo de la dirección de Hacienda si no de todos sus trabajadores. Si nuestras cifras le sonrojan por la enorme diferencia no es problema de este diputado", le espetó González a su colega alavés.

Cara a cara el martes A juicio de González, la premisa que ha marcado el buen rumbo de su departamento en la lucha contra el fraude desde hace cuatro años ha sido la "tolerancia cero con las conductas corruptas". Si esta actitud se hubiera implementado en Álava, insistió, no hubieran existido el caso Miñano, el caso Bravo o lo acontencido en la Hacienda de Bizkaia. "Son cuestiones que nos sonrojan a todos y nos distancian de la sociedad", concluyó.

Para tratar de limar asperezas y reconducir la situación, González confía en "aclarar con serenidad" este desencuentro con Cimiano en el próximo Consejo Vasco de Finanzas, que se celebrará el martes.