madrid. La Agencia Tributaria pondrá en marcha este año un plan para luchar contra la economía sumergida, que estrechará el cerco sobre las personas que perciben rentas sin declarar y que, al mismo tiempo, cobran el paro u otras prestaciones sociales. Así se recoge en el Plan de Control Tributario 2011 publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) que contempla también incrementar las actuaciones de carácter presencial, con visitas a locales y negocios para detectar economía sumergida y que se hará conjuntamente con la Inspección de Trabajo y de Seguridad Social y con la Tesorería General.

Según este plan Hacienda también explotará y analizará la información sobre actividades económicas que se intercambia con la Seguridad Social, y hará uso de la nueva declaración informativa sobre terminales de tarjetas de crédito y sobre consumo de energía eléctrica para detectar negocios sin declarar. Además, tratará de identificar a trabajadores "falsamente autónomos".

Dentro de este plan para luchar contra la economía sumergida, también se contempla el control sobre las actividades derivadas de la importación de bienes procedentes fundamentalmente de Asia y otros terceros países, así como la investigación de canales de comercialización de los bienes importados, incluyendo actuaciones de carácter presencial.

Hay que aclarar que en principio y tanto en loa CAV como en Navarra este plan no tendrá vigencia dado que ambas comunidades tienen competencias exclusivas en la materia. Eso sí, tradicionalmente, ambas administraciones regionales han seguido en sus propias normativas el camino que marca la Hacienda estatal.

Símbolos externos de riqueza El Plan de Control Tributario 2011 contempla, asimismo, otras actuaciones, como el control de actividades profesionales a través de los signos externos de riqueza que permitan el descubrimiento de ingresos no declarados y de las facturas falsas de IVA. También se prestará especial atención al uso de billetes de alta denominación (importes especialmente elevados), así como a la detección de falsas empresas subcontratistas.

El seguimiento de condenados o denunciados por delito fiscal, al objeto de adoptar las medidas procedentes, o el control de contribuyentes que declaran en módulos serán otras de las prioridades de la lucha contra el fraude. En este último caso, Hacienda prevé también realizar visitas a declarantes en módulos para obtener indicios de prácticas fraudulentas, como dividir artificialmente su actividad entre varios sujetos con el fin de eludir la exclusión de este régimen.

La lucha contra la deslocalización y la planificación fiscal abusiva será otro de los objetivos prioritarios para 2011. De este modo, Hacienda intensificará el control sobre centros de planificación que comercializan productos dirigidos a la defraudación fiscal, prácticas financieras que pueden propiciar la opacidad de cuentas y actuaciones que persiguen la acreditación indebida de gastos financieros para reducir o eliminar bases imponibles a tributar en España. También serán objeto de atención prioritaria el uso abusivo de los precios de transferencia, sobre todo en las reestructuraciones empresariales como consecuencia de la crisis.