Cuando la imagen aparente se convierte en una obsesión nos alejamos de la realidad hasta el punto de creer que se cumple lo que decía Maquiavelo: "Pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos". Zapatero pretendió a principios de 2008 proyectar la imagen de que la crisis era "una falacia. Puro catastrofismo" y hoy intenta dar una imagen de unidad con los mismos empresarios que han firmado un demoledor documento de 120 páginas entregado al Rey donde se ponen de manifiesto las carencias y problemas de la economía española que el propio presidente del Gobierno no parece aceptar. Enrocado en una cruzada por ganar credibilidad, Zapatero ya tiene en su álbum la fotografía de la unidad Gobierno-empresarios, como si éstos fueran representantes plenipotenciarios de "oenegés" dedicadas a la salvaguarda de los intereses patrios, cuando en realidad son presidentes de compañías que deben rendir cuentas ante unos accionistas cuyo objetivo es poner en valor (plusvalías) sus inversiones. Estos empresarios son los mismos que han transmitido al Jefe del Estado su particular visión de la economía española que podemos concretar en varios puntos:
1. La "falacia catastrofista" se ha llevado en menos de tres años el 42% de la destrucción de empleo en Europa y entre 2007 y 2009 el valor-país de España se desploma retrocediendo hasta prácticamente el valor de 1997.
2. "España se sitúa por detrás de todos los líderes (a excepción de Grecia, Italia y Portugal) en los indicadores de control de corrupción. Sólo entre 2007 y -2009, los casos de corrupción urbanística se han incrementado en España en casi un 400%, con un aumento del 68% en el número de imputados y un aumento de más del 500% en el número de cargos públicos implicados (Fuente: Greenpeace)".
3. "Casi la mitad se concentra en cinco sectores que suponen el 47,94% del PIB y el 51,42% del empleo. Son sectores de sofisticación baja y alta vulnerabilidad a ciclos y crisis".
Podíamos seguir poniendo más ejemplos, como la reestructuración de las Cajas, que destruirán casi 30.000 empleos; la deuda de los bancos y las constructoras; la sociedad del conocimiento y la escasa inversión en I+D+i; la FP... pero el espacio apremia y prefiero resumir todo en una frase lapidaria del citado documento de la Fundación Everis: "Si España estuviera en el puesto 148 mundial de futbol sería un escándalo nacional y la gente se manifestaría en las calles. Sin embargo, no nos preocupa que la universidad española mejor clasificada en el conocido ranking de la Universidad de Shangai ocupe esta posición".
