Madrid. Santiago Niño Becerra, catedrático de Estructura Económica de la Universidad Ramón Llull, participó el pasado jueves en el 6º Encuentro Anual de Innovación celebrado por Ibermática en Madrid. En el evento compartió con expertos de otras áreas del conocimiento una mesa redonda en la que lanzó la pregunta "¿qué hacemos con los cuatro millones de desempleados en España?", una cuestión que respondió a DNA el polémico economista catalán que hace cuatro años vaticinó la actual crisis mundial.

Recientemente usted ha ofrecido una conferencia en La Rioja donde hizo una sugerencia que ha levantado cierta polémica...

Tal vez haya sido porque no gustó algo que dije en Logroño. Comenté que la evolución natural de La Rioja debería ser colaborar con el País Vasco y Navarra. En la charla hubo empresarios riojanos que me dieron la razón.

Pues era precisamente la patronal riojana la que presentaba recursos judiciales contra las normas fiscales vascas...

Sí. Esos recursos tenían básicamente un componente político. Lo que dije en Logroño es que el eje del Ebro está medio muerto. Podía tener cierto sentido cuando Zaragoza era un polo de generación económica importante gracias a General Motors, que con su planta de Figueruelas supone el 50% de los ingresos por exportación de Aragón. A nada que esta compañía desaparezca eso será un cataclismo en Zaragoza y La Rioja se va a quedar flotando entre dos aguas. Por eso digo que la evolución natural de esa región sería trabajar con el País Vasco y Navarra. Entre La Rioja, la zona burgalesa de Miranda de Ebro, Euskadi y Navarra se puede conformar un polo económico potente que, entre comillas, podría marginar a Madrid. El Estado como lo conocemos tiene los años contados. Iremos hacia una estructura de clústers de colaboración y sinergias entre las zonas geográficas, superando la idea de eurorregiones. Yo paso de política pero la famosa idea del señor Ibarretxe de estado asociado es muy buena porque permite crear estructuras nuevas.

Entonces, más que estados ¿habrá economías?

Sí, creo que los tiros van por ahí. Pero hasta ahora se ha tendido a politizar, lo cual prostituye todo. De todos modos, la crisis ayudará a que se produzca ese proceso.

¿Cómo califica la situación económica actual?

Es terrorífica. Se está produciendo una caída que no es un hundimiento repentino pero sí progresivo. El crash ya ha sucedido, ha ocurrido este pasado verano. No ha habido un hundimiento de la Bolsa como en 1929 pero los estados se han dado cuenta de que las medidas adoptadas en los tres últimos años han fracasado. Cuando el BCE decretó la barra libre, cuando Japón y EEUU diseñaron un segundo plan y tercer plan de estímulos, cuando comenzó la guerra de divisas, fue cuando se produjo la constatación del fracaso de esas medidas. A partir de ahora estamos viendo la aplicación de parches para llegar a mañana y nos vamos a ir deslizando por la pendiente.

Irlanda ha aceptado la ayuda de la UE. Grecia cayó y Portugal está sobre el alambre. ¿España?

Lo de Irlanda era claro; era insostenible su situación, con una necesidad de 240.000 millones de euros, lo que supone el 140% de su PIB. El problema es que, de rebote, está cayendo Portugal. Irlanda no nos afecta tanto porque tenemos poco negocio con ellos, pero Portugal..., eso es otra cosa porque 100.000 millones de euros de deuda pública portuguesa la tiene España y también 70.000 millones de euros de deuda privada. Pero bueno, como Irlanda, Portugal, Grecia son economías pequeñas puede llegar a ser un problema manejable para la UE. En cambio, ayudar a España no será tan fácil. Hay que recordar que la economía española supone el 8,5% del PIB de la Unión Europea, por lo que no sería sostenible, pues necesitaría 750.000 millones de euros de inyección. Desembarcarían de Bruselas y nos dirían lo que tenemos que hacer, que sería la adopción de recortes presupuestarios tremendos. De hecho, ya se habla de subir al 20% el IVA, incluso se están empezando a oír rumores de subirlo al 23%.

¿Qué espera para 2011 y los años posteriores? ¿Cuándo conseguiremos superar la crisis?

La caída progresiva de la que hablaba seguirá en 2011 y llegará hasta 2012, de forma muy parecida a lo que sucedió en la Gran Depresión. La de ahora, como en aquel entonces, será una crisis sistémica, con un estancamiento hasta 2015 y, a partir de entonces, una recuperación muy suave hasta 2020. Al final, esta crisis durará más de diez años.

Usted auguró en su libro "El crash del 2010" la situación que estamos viviendo. ¿En qué basó esa predicción?

Todo comenzó cuando llegaron a mis manos los datos de la deuda privada española. En 1997 suponía el 65% del Producto Interior Bruto pero en 2006 ese porcentaje se había elevado al 210%. A partir de esas cifras empecé a pensar en la situación y vi cómo había crecido el endeudamiento, la evolución de los créditos inmobiliarios, etc., y me di cuenta de que nos dirigíamos hacia un crash. A mí me da igual quién gobierne. La verdad es que no entiendo que el PP quiera llegar al poder porque, con la que está cayendo, estar en el Gobierno es tener una papeleta tremenda.

¿Qué soluciones plantea para salir de la crisis?

Las soluciones tienen que salir de una acción integrada de expertos de todos los países porque esta crisis es postglobal. En primer lugar, es imprescindible que toda la porquería que hay en los bancos salga a la luz al mismo tiempo.

¿Eso no colapsaría el sistema financiero?

Evidentemente, habría que hacerlo de manera controlada. En segundo lugar, habría que hacer una limpieza de la deuda. También hay deuda que no se va a poder pagar. En España la deuda total representa el 400% del PIB. Por eso hay que poner encima de la mesa este asunto y promover fusiones bancarias y una nueva forma de hacer las cosas, cancelando las deudas que no se van a poder cobrar.

¿Cuáles son los sectores de futuro?

La biotecnología y la tecnogenética. La logística también tiene un gran recorrido porque ayuda a incrementar la productividad. Además, tendrán importancia actividades centradas en el reciclaje, la recuperación y la rehabilitación. También investigación energética y, a otro nivel, la alimentación.

¿Y los que pueden irse al traste?

Pues, por ejemplo, una empresa que se dedique a investigar en enviar fotos por el móvil pienso que no tiene futuro. El comercio también caerá en cascada y la industria del automóvil tiene un gran problema. Hay 18 plantas en España y eso es insostenible. Por eso han de producirse absorciones en escala y agrupaciones en clústers.

¿Qué se puede hacer ante el estancamiento del sector inmobiliario?

Crear una megaagencia inmobiliaria para que las entidades financieras puedan colocar los inmuebles -viviendas y oficinas- que se han quedado por los impagos. La vía de la venta de pisos está agotada y, pienso, se irá hacia el alquiler.

¿Y el mercado de trabajo? ¿Se recuperará?

Fui el primero en hablar hace años de que volveríamos en España a un paro del 20%, porcentaje que se alcanzó en 2009. La situación del mercado de trabajo irá a peor porque nos dirigimos hacia una mejora de la productividad y la eficiencia. El objetivo es gastar menos recursos, lo que ocasionará que sobre población activa. Así, habrá niveles de paro estructural muy altos, hasta el punto de que tras la crisis el paro no bajará del 15% en España. ¿Quién va a tener trabajo? Sólo los que sean más profesionales, aquéllos a los que se rifan las empresas, que son el 10% de la población activa. Habrá un 20% de empleo fijo y entre un 20% y un 30% de temporales de bajo valor añadido que se irán rotando. El resto estará pululando por el desempleo, habiendo gente que no será jamás necesaria. Los trabajos de menos valor añadido serán automatizados.

¿Qué se puede hacer con esas personas que "no serán necesarias"?

Legalizar la marihuana. No se ría. ¿Qué pasó en 1933 en Estados Unidos? Se levantó la ley seca para que la gente pudiera ahogar sus penas en alcohol y para recaudar más impuestos. Legalizar la marihuana, televisión barata o gratis y un subsidio de subsistencia es lo que se puede hacer.

Pero eso es decir que hay que atontar a los desempleados...

Pues sí, quienes no vayan a ser necesarios que no molesten; el subsidio de 426 euros y la llamada generación ni-ni creo que ya nos sitúan en la antesala de ese escenario.

Entonces, ¿quiere decir que regresaremos a los 80, cuando la reconversión industrial disparó el paro y la sociedad cayó en una crisis de identidad en la que la droga se extendió como la pólvora?

No, eso no volverá. La crisis de los 80 nació de los problemas del petróleo de la década anterior. Pero había unas expectativas y se superó a base de crédito. Fue una superación ficticia. El origen de la crisis actual es el cierre del crédito, el exceso de oferta, como sucedió en la crisis del 29. Pero ahora tenemos una tecnología y unas posibilidades de innovar que no se van a detener.

Santiago Niño Becerra, durante el 6º Encuentro Anual de Innovación de Ibermática. Foto: dna

sus frases

"Paso de política pero la idea de Ibarretxe de crear un estado asociado es muy buena"

"Para ayudar a la economía española la UE tendría que inyectar 750.000 millones"