madrid. La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, insistió ayer en que España "no está directamente afectada" por la crisis de deuda de Irlanda porque la situación económica es distinta y las entidades españolas no están expuestas a la deuda irlandesa. Salgado se mostró convencida de que Irlanda pedirá ayuda financiera de la UE si la necesita para reparar su sector bancario y garantizar así la estabilidad de la eurozona. "Cualquier actuación que tome Irlanda en la buena dirección será bienvenida por parte de España", resaltó.

"Es evidente que una volatilidad excesiva en los mercados de deuda pública no beneficia a nadie", admitió la vicepresidenta económica. "Pero España no está directamente afectada por este problema", añadió. "Nuestra exposición a este problema en términos de la tenencia de activos que puedan tener entidades españolas es pequeña. Y por otra parte nuestros fundamentos económicos, las actuaciones que el Gobierno ha puesto en marcha, el hecho de que se inicie la recuperación, el nivel de nuestra deuda, o la diversificación de nuestra economía y el plan de austeridad que está ofreciendo ya resultados hacen que estemos muy separados de sufrir los efectos de esta situación", resumió Salgado.

A su juicio, Irlanda "es un país responsable, que es consciente no solo de sus propias dificultades sino de dificultades que podrían existir en el supuesto en que las medidas que ponga en práctica no sean suficientes". Salgado se mostró convencida de que la actual situación de volatilidad no va a durar "mucho" porque el Gobierno de Dublín se ha comprometido a presentar medidas correctoras este mes.