Vitoria. El FMI y la OIT han alertado sobre el peligro de que el paro juvenil puede derivar en una "generación perdida". Para Txiki Muñoz "es culpa de las políticas que se aplican, y de quienes mandan qué políticas hay que hacer".

¿Ha sacado alguna conclusión interesante de lo que hemos escuchado estos días en Oslo?

La que está perdida es la clase política, conducida como un rebaño por el capital y por la banca, que quieren una reforma laboral y se hace porque Zapatero trabaja para ellos. Le piden la reforma de pensiones y la quiere hacer, y ahora se va a reformar la negociación colectiva para centralizar los convenios. Zapatero, no sé cuándo, se cayó del caballo y se ha convertido en un adefesio de hombre socialista.

Ha citado tres reformas: laboral, pensiones y negociación colectiva. La movilización en Euskadi en contra de la primera no la ha alterado y parece que la huelga del 29-S llega a toro pasado.

El real decreto que presentó el Gobierno se aprobó en junio y en el trámite parlamentario se ha empeorado con la colaboración del PNV. Lo que pasa es fuerte porque la patronal encima pide más recortes y pagar menos impuestos, con el beneplácito del servilismo político.

Y ahora se anuncia, casi de forma inmediata, la de las pensiones.

El Gobierno ha explicado con claridad que va a empeorar las prestaciones y que quiere alargar la edad de jubilación porque el objeto de la reforma es convertirse en el negocio de las pensiones, en un negocio privado.

¿Cómo están las relaciones con el Gobierno Vasco?

Ninguna. Dicen que se negocia a tres bandas sin que nadie sepa qué. Aquí cada vez que Madrid tiene un problema presupuestario se saca el difunto a pasear. Y el difunto es el Estatuto, su instrumentalización. El debate no puede ser si vienen 300 millones o más, sino la capacidad de decidir qué políticas de empleo queremos hacer aquí, porque se va a transferir el modelo español de políticas de empleo que es un absoluto fracaso. ¿El Gobierno Vasco? A nosotros nos maltrata. Esos demócratas de librillo, que tienen detrás una prensa que encima les hace propaganda, han hecho decretos para usurparnos la representación.