vitoria. En la Hacienda alavesa no están dispuestos a caer en el mismo error que el consejero de Economía, Carlos Aguirre, cuando hace unos días se pasó de frenada y proclamó el fin de la crisis en Euskadi. Siendo técnicamente verdad aquella proclama -el PIB vasco creció un 0,5% interanual por primera vez tras 18 meses en negativo-, al discurso triunfalista le faltó sin embargo el tacto suficiente que exigen, como mínimo, los 130.000 parados que en estos momentos buscan trabajo en la CAV. Al Gobierno le tocó entonces recular.

Y lo hizo el pasado miércoles a través de uno de sus primeros espadas en la materia, el viceconsejero de Presupuestos y Control Económico, Andrés Araujo, que rebajó el tono triunfalista de Aguirre con el conocimiento empírico en la mano y advirtió de que la situación, aún siendo favorable, "no es para tirar cohetes".

El tirón de Francia y Alemania En ese espejo se miró ayer la Diputación de Álava al presentar el Informe de Coyuntura correspondiente a los meses de julio y agosto. "Los indicadores son buenos, pero queremos ser realistas; todavía queda mucho camino por recorrer", reconoció el diputado de Hacienda, José Luis Cimiano. A rebufo de Francia y Alemania, las dos locomotoras que están tirando de Europa con crecimientos por encima del 3% y que, curiosamente, son los mejores clientes del empresariado alavés, las exportaciones crecieron un 17,6% hasta agosto y las importaciones lo hicieron hasta casi el 22%, una tendencia que "permitirá a Álava salir antes de la crisis", sostuvo Cimiano.

También el Indice de Producción Industrial (+11%) y la recaudación fiscal registró un comportamiento aceptable, con sendas subidas en el IVA y el IRPF y un desplome previsible del impuesto de Sociedades del 16% hasta agosto. Fuentes del Ejecutivo foral no creen que esta tasa repunte en los próximos meses. Así y todo, el comportamiento global de las arcas públicas será positivo respecto al ejercicio 2009. Cimiano insistió ayer en que mantienen una previsión de crecimiento fiscal para 2010 del 6%.

La cautela del discurso foral se resolvió ayer al hablar del paro alavés, que creció en agosto un 5% respecto a julio. "Es un dato preocupante, pero deber ser tomado como positivo si lo comparamos con el conjunto de la economía española", dijo Cimiano. En estos momentos, la provincia presenta un panorama de casi 20.000 alaveses en busca de empleo y una tasa de paro del 9%.