Bilbao. El Gobierno Vasco ha llevado a cabo siete operaciones de colocación de deuda pública por un importe cercano a los 1.000 millones de euros. Estas operaciones, pendientes de realización desde mayo y a la espera de que las condiciones de los mercados financieros mejoraran, se han podido materializar después de que la agencia de calificación Fitch confirmara la triple A para la deuda vasca. Dicha colocación se ha realizado a través de cinco emisiones de bonos con distintos plazos (a 5, 8 y 10 años) y dos de préstamos schuldscheim. La emisión más cara ha sido a un interés del 4,80%; la más barata no ha sido facilitada. Tras estas colocaciones, a Lakua sólo le quedaría por emitir deuda por unos 200 millones, ya que a finales de marzo el Consejo de Ministros autorizó a la CAV endeudarse por un máximo de 1.196 millones de euros. Esta autorización correspondía a la deuda prevista para la primera mitad de 2010, mientras que el volumen total de deuda presupuestado para este año era de 2.038 millones de euros.