El Tribunal Constitucional admitió ayer a trámite el recurso que el Gobierno interpuso el pasado 9 de febrero contra una decena de preceptos de la ley gallega de cajas, por lo que queda suspendida la norma, que facilitaba la unión de Caixa Galicia y Caixanova. En una providencia, el Constitucional anunció que tramitará la impugnación de los servicios jurídicos del Estado contra dichos preceptos de la ley de cajas, aprobada por el Parlamento de Galicia a finales de 2009 con amplia mayoría, ya que contó con el respaldo del PP y el BNG, frente al rechazo de los socialistas gallegos.