madrid. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo ayer que la reforma que plantea el Gobierno del mercado laboral está "centrada" en mejorar el uso del contrato de fomento del empleo estable (que contempla una indemnización por despido de 33 días, frente a los 45 de un indefinido ordinario). Zapatero así lo aseguró en rueda de prensa, tras explicar en La Moncloa los detalles de esta propuesta de reforma a los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, y a los presidentes de las patronales CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y de CEPYME, Jesús Bárcenas. Eludió dar más detalles sobre las modificaciones del contrato de fomento estable, que se utiliza para convertir en indefinidos a los desempleados de 16 a 30 años, a las mujeres en sectores con poco empleo femenino, a los mayores de 45 años y a los parados que lleven al menos 6 meses inscritos en el Inem. Cuando este contrato se extingue por causas objetivas y el despido es declarado improcedente la cuantía de la indemnización es de 33 días por año trabajado, hasta un máximo de 24 meses. A pesar de las reiteradas preguntas para que concretara a qué otros colectivos se extenderá dicho contrato, sostuvo que los detalles se irán conociendo. "No debo anticipar la propuesta concreta, pero la hay y vamos a trabajar con la cautela necesaria". Añadió que permitirá a los empresarios no aumentar sus costes por contratar de forma indefinida y que, al mismo tiempo, permanezcan los derechos de los trabajadores, algo que es "posible", puntualizó. Por ello, hizo hincapié en que "hay que utilizar todo el potencial" del contrato de fomento del empleo estable y expresó su esperanza de que, en un tiempo "razonable", haya resultados. El documento contempla también la posibilidad de usar la reducción de jornada como ajuste temporal de empleo, reducir los contratos temporales y crear un plan extraordinario de empleo para jóvenes de hasta 24 años. El presidente aseguró que la propuesta del Gobierno de reforma laboral ni rompe el equilibrio entre empresarios y sindicatos, ni supone la pérdida de derechos para los trabajadores. Afirmó que las reformas laborales son "auténticamente útiles si son acordadas" y que ese es el "espíritu y la línea" que marca el documento de propuesta de reforma aprobado esta mañana por el Consejo de Ministros.
Sobre si ha puesto algún plazo a los agentes sociales, respondió que sería "un poco absurdo poner una fecha concreta", pero que el Gobierno les ha transmitido que "quiere que el diálogo sea rápido y que nos pongamos ya manos a la obra".
Especificó que ni rompe el equilibrio entre empresarios y sindicatos, ni supone la pérdida de derechos para los trabajadores. Esto se traduce, indicó, en que en el documento no se plantean nuevas figuras contractuales, "lo que sí hay es la posibilidad" de modificar las existentes. El Gobierno ha diseñado además un marco de reforma abierto que pretende facilitar y "no sustituir" los ámbitos de negociación "naturales", por lo que Zapatero se mostró satisfecho por el avance que registra la negociación colectiva que ultiman la CEOE y CEPYME y los sindicatos CCOO y UGT.