Terence Crawford ha sorprendido al mundo del boxeo con el anuncio de su retirada, a la que ha llegado, dice, porque no tiene “nada más que demostrar”. El boxeador de Omaha abandona la disciplina a los 38 años, tras 17 de trayectoria profesional y 18 títulos mundiales en cinco divisiones, siendo considerado en la actualidad como el mejor boxeador del planeta libra por libra. Bud se despide invicto, con un récord de 42 victorias en otros tantos combates.

“Me aparto de la competición, no porque ya no pueda pelear, sino porque he ganado otra clase de batalla: la de poder irme por decisión propia. Esto no es un adiós, es solo el final de un combate y el inicio de otro”, ha comunicado Crawford en las redes sociales a través de un vídeo.

'Canelo' se queda sin revancha

Crawford abandona el ring tres meses después de vencer posiblemente el combate más importante de su trayectoria deportiva, el que le enfrentó a Saúl Canelo Álvarez. Sin lugar a dudas, el pleito de mayor repercusión de su carrera. El estadounidense se impuso al mexicano tras subir dos divisiones. La pelea se decantó a los puntos con una decisión unánime de los jueces favorable para Crawford, que ha logrado finalizar por la vía rápida del nocaut 31 de sus 42 peleas. El triunfo otorgó a Bud la condición de primer pugilista de la historia en ser campeón indiscutible en tres divisiones diferentes (superligero, wélter y superwélter) en la era de los cuatro organismo mundiales del boxeo (CMB, AMB, FIB, OMB). A su vez, según la prestigiosa clasificación de The Ring, se elevó como el mejor boxeador del mundo libra por libra. También el ranking de ESPN le concede ese estatus.

El boxeador de Omaha ha destacado por atesorar una inteligencia táctica excepcional que ha logrado combinar de manera demoledora con su condición de ambidiestro, que le ha permitido cambiar de guardia a lo largo de sus combates para convertirse en imprevisible, como ocurrió contra Canelo. También ha mostrado una velocidad envidiable y una gran defensa, un repertorio técnico que han conformado un púgil tremendamente completo y versátil capaz de adaptarse a diferentes escenarios y exhibir distintas propuestas.

"En paz" consigo mismo

Crawford asegura sentirse “en paz”, aunque extraña que haya tardado tres meses después de su último combate en anunciar su retirada. “Le he entregado a este deporte hasta el último de mis alientos, cada cicatriz, cada triunfo, cada pedazo de mi corazón. Y estoy en paz con lo que viene. Ha llegado el momento. Todo boxeador sabe que le llega este momento. Lo único que no sabemos es cuándo”, ha añadido en su cuenta de Instagram.

El púgil de Omaha ha querido acordarse de todos aquellos detractores que a lo largo de su carrera le acusaron de rehuir de los rivales más peligrosos. "He pasado mi vida persiguiendo algo, no cinturones, no dinero ni portadas, sino una sensación: esa que tienes cuando el mundo duda de ti, pero sigues ahí, sigues peleando y sigues demostrando que todos están equivocados. Este deporte me lo dio todo. Peleé por mi familia, peleé por mi ciudad. Peleé por el chico que fui, ese que no tenía nada más que un sueño y un par de guantes, y lo hice siempre a mi manera”, ha concluido Crawford.

Topuria retó a Crawford

Uno de los últimos retadores de Crawford ha sido Ilia Topuria. El doble campeón mundial de las artes marciales mixtas trató de provocar al púgil estadounidense después de que este venciera a Canelo. "No hablo de lo que pasaría entre Crawford y yo en un octágono, hablo de lo que pasaría en un ring. ¡Lo pongo a dormir en el primer contacto (golpe)!", publicó en las redes sociales. Es pública la intención del hispanogeorgiano de pasarse al boxeo y, como ha comentado recientemente, no dentro de demasiado tiempo. Pero este no será un reto en su camino.