La sede de la Diputación Foral de Álava acogió esta mañana de viernes la presentación de la octava edición de la Wine Run Rioja Alavesa. Este evento enoturístico se llevará a cabo el próximo domingo 26 de octubre en Oyón y reunirá a más de 3.000 personas.
De hecho, las inscripciones para la marcha ya se agotaron hace semanas y ahora solo quedan los últimos dorsales disponibles para las carreras. Cabe recordar que el evento está dividido en dos. Por un lado, dos modalidades de carreras: 10 y 20 kilómetros, y por el otro, una marcha popular entre bodegas y viñedos.
Durante el acto participaron la Diputada de Desarrollo Económico e Innovación, Saray Zárate, el alcalde de Oyón, José Manuel Villanueva, el Presidente de la Cuadrilla de Rioja Alavesa, Txema Elvira y el Responsable de la Wine Run, Iñigo Recio.
Además, también estuvieron presentes durante la ponencia representantes de entidades locales: tanto Rosa García, en representación de la Ruta del Vino de Rioja Alavesa, como Itxaso Compañón, en representación de la Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa.
Se espera que la octava edición sea “un nuevo éxito rotundo” tras la buena acogida en las ediciones anteriores, según Txema Elvira. “El evento es una acontecimiento que sirve para que se vayan conociendo las diferentes localidades y paisajes de Rioja Alavesa. Llevamos apoyando la organización desde 2016 con la idea de que estas iniciativas son necesarias y suponen un impacto positivo para nuestro territorio”, aseguró el Presidente de la Cuadrilla de Rioja Alavesa.
Rosa García respaldó sus palabras asegurando que es “una ocasión perfecta” para conocer los parajes del territorio: “Queremos mostrar la belleza de nuestros paisajes y que todos los participantes puedan disfrutar de la zona”.
Una mezcla de vino, deporte y turismo
El objetivo de la Wine Run no es competir ni mucho menos por ser el mejor del evento. El valor reside más allá en lo que Iñigo Recio, responsable del acontecimiento, quiso catalogar como “una carrera disfrutona” pese a que sí existan ciertos tramos de desnivel.
“Quiero agradecer el apoyo de todas las entidades y bodegas que hacen realidad el evento. La marcha es una excusa perfecta para conocer Rioja Alavesa en esta fecha esencial en la que el viñedo tiene su mejor color”, comentó Recio.
El responsable de la Wine Run también mostró su satisfacción con la acogida por parte de los participantes: “Estamos muy contentos con el apoyo y cerca de cerrar los últimos dorsales disponibles. Esto nos hace ver que a la gente le encanta el plan”. Además, también destacó la participación femenina que ya supone el 53%.
Saray Zárate, Diputada de Desarrollo Económico e Innovación, aseguró que “la marcha rural une vino, territorio, deporte y familia”, todo ello bajo la marca Rioja Alavesa.
“Es una cita ideal para promocionar nuestros vinos, nuestro mayor tesoro. Personas de Madrid, Barcelona o incluso Tenerife vienen a descubrir nuestra tierra. El vino se bebe, se vive y se comparte”, afirmó la diputada.
Más allá de las carreras y de la marcha popular, la Wine Run también tiene otras actividades. Durante la marcha los participantes tendrán la oportunidad de degustar los vinos y caldos de bodegas como Piérola o Bujanda, además de que en la Plaza de Fueros del municipio oyonés tendrá lugar la Feria de Vinos y Pintxos.
El programa se completará con la actuación del grupo Radio Vinilo 80, que pondrá la nota musical en directo de la feria a partir de las 14.00 horas. Además, también habrá una paellada popular el domingo y para los más interesados se han diseñado diferentes paquetes de actividades relacionadas con el vino y el deporte por la zona.
Oyón toma el testigo
La localidad alavesa de Oyón será la encargada de albergar la octava edición de la Wine Run, lo que la convertirá en la más oriental de la historia.
El evento llega a la localidad oyonesa tras las ediciones de 2016 y 2017 en Laguardia, 2018, 2019 y 2022 en Labastida, y 2023 y 2024 en Elciego. “Nuestra idea es que la sede cambie cada dos años. Tener una primera toma de contacto con el lugar para que al año siguiente se pueda mejorar en todo lo posible”, explicó Recio.
No obstante, el responsable desveló que el traslado de sede supone “un reto importante” en cuanto a la logística del evento: “Nos estamos quedando sin localidades con las infraestructuras necesarias para albergar la Wine Run”.
José Manuel Villanueva, alcalde de la localidad, aseguró estar nervioso por la ceremonia del evento, pero también recalcó que en Oyón están acostumbrados a celebrar diferentes marchas benéficas.
“Tenemos ganas de que empiece, que pase y que el año que viene sea mejor si cabe. En Oyón estamos impacientes y deseando que la gente venga”, concluyó Villanueva.