Síguenos en redes sociales:

El Muay Thai se abre paso en Vitoria

La gasteiztarra Eider Bernaola, que reside hoy en día en Bangkok, competirá en los Mundiales de Muay Thai WBC programados a finales de junio en Verona

El Muay Thai se abre paso en VitoriaCedida

El Muay Thai ya es una realidad en Vitoria y Álava. En parte gracias a la iniciativa de Eider Bernaola y su socio Moisés del Piño, ya que ambos decidieron abrir hace tres años el club deportivo Rak Nuua Muay Thai Club. Desde entonces, el conocido como “El arte de las Ocho Extremidades” no ha hecho más que crecer en la capital vasca. 

Al principio empecé a practicar este deporte como hobby, pero hace tres años dejé mi trabajo estable

Su fundadora admite incluso estar sorprendida con la gran acogida que ha tenido. “Llevamos abiertos unos pocos años y la verdad es que ha sido un no parar y está funcionando de maravilla, no esperábamos tanto éxito. Al final, solo ofrecemos Muay Thai y no hacemos otro tipo de actividades, es decir, que entrenamos y competimos únicamente para este deporte”, confiesa.

Eider Bernaola, una alavesa que practica la modalidad de Muay Thai.

Eider reconoce que tuvo que tirar de valentía para que el Muay Thai echara a andar por tierras alavesas. “Al principio empecé a practicar este deporte como hobby, pero hace tres años dejé mi trabajo estable y monté junto a Moisés el Rak Nuua Muay Thai para poder dedicarme más seriamente a la competición de alto rendimiento. Aunque fue un paso arriesgado, acerté de pleno”.

Gracias a esa valentía, Eider ha optado por abandonar sus orígenes y se encuentra en la actualidad en Bangkok para poder trabajar de forma adecuada la carga deportiva. El Muay Thai es un deporte que se ejecuta de pie, en el que se permiten puñetazos, codazos, rodillazos y patadas, así como lanzamientos o agarres entre los competidores.

Suelo estar en diferentes épocas del año en Bangkok, ya que el Muay Thai tiene allí más negocio y es más sencillo que te paguen

“Me estoy preparando para los Mundiales y en España es más complicado hacerlo. A nivel profesional aquí hay más oportunidades y es más fácil competir en Muay Thai para así llegar en la mejor forma posible a junio”, razona. 

Eider Bernaola

Sacrificio económico En el lado negativo de la balanza, Eider confirma que económicamente es difícil mantener este tipo de entrenamientos. “Suelo estar en diferentes épocas en Bangkok. Al principio venía dos meses, luego en agosto y después medio año. Incluso esta vez acudiré a los Mundiales de Italia directamente desde aquí”.

La vitoriana no tiene reparos en subrayar que “todo está supeditado a la economía” porque, lamenta, “los deportes minoritarios tienen poca ayuda” y resulta difícil dar continuidad a su pasión por esta modalidad. 

Sin embargo, Eider también admite que “ahora mismo existe un boom de las artes marciales, está evolucionando muy rápido y eso nos está ayudando. Al final, los gastos de ir a los mundiales y poder competir son cosas que afrontamos nosotros a nivel individual”.

Eider Bernaola

La gasteiztarra critica que es complicado vivir de este deporte. “En especial siendo chica ya que los chicos en ese aspecto lo tienen más fácil”, precisa Bernaola. “Esa es la razón de que resida durante mucho tiempo en Bangkok, ya que aquí el Muay Thai tiene más negocio y es más sencillo que te paguen porque hay diferentes ligas y niveles”.

Lógicamente su buen hacer y curriculum también están atrayendo a patrocinadores. No en vano, Eider logró subirse el año pasado al podium gracias al tercer puesto en el Mundial WBC, pero se muestra ambiciosa y quiere más. “Este año espero quitarme la espinita y poder conseguir el oro”, desvela.

Lo que quiero es competir con las mejores de mi peso; intento llevarlo paso a paso sin ponerme metas inalcanzables

La vitoriana evita ponerse techos, aunque tampoco sueña con imposibles. “Principalmente lo que quiero es pelear y competir con las mejores de mi peso. Soy ambiciosa, pero también intento llevarlo pasito a pasito sin metas inalcanzables. Al final, el Muay Thai no se mide tanto por cuántas veces has ganado, sino contra quién te has peleado. Yo aspiro a compartir ring con las mejores de mi categoría de peso y poder decir que les he plantado cara”, asegura orgullosa.

Una modalidad exigente

El también conocido como Thai Boxing o Boxeo Tailandés es un arte marcial que requiere ciertos sacrificios y hasta una pizca de locura, según Eider. “Quien te diga que se dedica a este tipo de deportes y que afirme que nunca ha pensado en dejarlo o que ha tenido unas dudas o miedo, está mintiendo. Seguro que lo ha sentido, pero no lo ha reconocido”.

Ahondando en ello, la vitoriana confirma sin tapujos que “hay que estar loca para no plantarse de vez en cuando; ¿para qué cojones me estoy subiendo a un ring para partirme la cara? Al final, cada vez que subes estás poniendo un poco en riesgo tu vida”, advierte Bernaola, para quien “las emociones y controlar la adrenalina y el miedo son las claves para este deporte”.

También expone, eso sí, que es una modalidad noble que ayuda a adquirir valores en la vida. “Cuando nos subimos al ring lo hacemos desde un respeto. No es tanta la violencia como se puede percibir desde fuera, ya que nosotras sabemos que estamos compitiendo y nuestro objetivo no es matar a la otra persona. Siempre hay respeto y cariño por el rival porque al final tú no puedes hacer Muay Thai si no tienes a la otra persona delante con la que medirte”.

A pesar del peligro, a Eider sí le compensa este deporte, ya que “me ha aportado muchísimo autoconocimiento y fortaleza física y mental. También me ha dado conocimientos para cuidar mi cuerpo y tener un estilo de vida determinado para tener la cabeza más amueblada”.

Futuro profesional La alavesa tan solo quiere centrarse ahora en sus entrenamientos para poder llegar de la mejor forma posible a Italia. “En mi carrera deportiva lo que busco es poder superarme a mí misma y realizarme como deportista. También me gustaría dejar un poso de cara a que mi club deportivo siga creciendo y teniendo ese reconocimiento”, precisa.

En mi carrera deportiva lo que busco básicamente es poder superarme a mí misma y realizarme como deportista

Algo que ya está sucediendo porque su club ha empezado a sacar talento. “Estamos contentos de colaborar en nuestro barrio. Queremos que este deporte sea una herramienta y un medio para conectar con las personas”, reconoce Eider, quien una vez acabe su carrera deportiva se volcará al 100% en el club que regenta.