“Pasará un tiempo hasta que sea consciente de lo que he vivido”, dijo Iker Irribarria a los medios de comunicación al término de su último partido como pelotari profesional.
“He disfrutado con la gente que quiero, con los que han estado todos los días conmigo. Me quedo con eso. Ha sido simple, bonito y especial para mí”, diseccionó el delantero de Arama, quien reconoció que el homenaje le tocó el corazón: “He jugado finales, las he ganado y las he perdido, pero cuando es un adiós cuesta un poco más. Es un día raro y las sensaciones son raras. Estoy emocionado, eso está claro”.
El manista guipuzcoano cerró su trayectoria con un pelotazo al rebote, su ariete. “Ha sido un final bonito. Hemos empezado un poco fríos. Ha sido una segunda parte bonita. He jugado a gusto. Estoy contento”, certificó Irribarria, quien admitió que “me quedo con que he disfrutado todos estos años. Ha sido una carrera corta, pero muy bonita. Vivo el día a día y la historia es la historia. Me siento muy afortunado de ser de la familia de pelotaris”.
“He jugado finales, las he ganado y las he perdido, pero cuando es un adiós cuesta un poco más. Es un día raro”
“Espero que a partir de ahora todo vaya bien. El adiós me llega temprano. Tengo por dónde enfocar la vida”, finalizó.