- El Chelsea confirmó ayer que el consorcio de Todd Boehly, copropietario de Los Angeles Dodgers de béisbol, ha adquirido el club de Stamford Bridge al magnate ruso Roman Abramovich por 4.250 millones de libras esterlinas -4.971 millones de euros-.
“El Chelsea Football Club puede confirmar que se han acordado los términos para que un nuevo grupo propietario, encabezado por Todd Boehly, Clearlake Capital, Mark Walter y Hansjorg Wyss, adquiera el club”, señaló el comunicado del club.
Boehly, Clearlake Capital, Mark Walter y Hansjorg Wyss se impusieron en la carrera por comprar la entidad inglesa, en la que había otros interesados, y deben esperar ahora la aprobación de la Premier League y del gobierno británico antes de que se apruebe la adquisición, que podría suceder a finales de mayo. “De la inversión total que se está realizando, se aplicarán 2.500 millones de libras esterlinas para comprar las acciones del club, y dichos ingresos se depositarán en una cuenta bancaria congelada en el Reino Unido con la intención de donar el 100% a causas benéficas, según confirmó Roman Abramovich”, explica.
“Además, los nuevos propietarios propuestos comprometerán 1.750 millones de libras esterlinas en inversiones adicionales en beneficio del club. Esto incluye inversiones en Stamford Bridge, la academia, el equipo femenino y Kingsmeadow y el financiamiento continuo para la Fundación Chelsea”, añade. Se entiende que el consorcio Boehly acordó cláusulas que bloquean el pago de dividendos o tarifas de administración hasta 2032, y también prohíben la venta de acciones de Chelsea durante 10 años.
El pasado 2 de marzo, Abramovich puso el club a la venta en medio de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. El empresario fue sancionado por el gobierno del Reino Unido el 10 de marzo, y Downing Street afirmó haber demostrado sus vínculos con el presidente ruso Vladimir Putin.
Abramovich, de 55 años, ha sido dueño del Chelsea desde 2003, tiempo en el que el equipo ganó 21 trofeos. Este jueves insistió en que todavía quiere cancelar la deuda de 1.500 millones de libras que el Chelsea tiene con él cuando se complete la venta del club; sin embargo, ese préstamo no se puede cancelar según los términos de las sanciones de Abramovich y se espera que se congele al completarse la venta.
El club debe venderse antes de la fecha límite del 31 de mayo, cuando vence la licencia temporal del gobierno para Chelsea. La licencia actual de Chelsea prohíbe que el club acuerde nuevos contratos con jugadores actuales o que traiga nuevos fichajes.