BARCELONA Calathes (5), Laprovittola (10), Hayes-Davis (5), Mirotic (7), Sanli (2) -quinteto inicial-, Exum (6), Smits, Davies (13), Jokubaitis (8), Kuric (10), Abrines (3) y Martínez.

LENOVO TENERIFE Fitipaldo (10), Salin (6), Todorovic (5), Sulejmanovic (2), Guerra (2) -quinteto inicial-, Dornekamp, Shermadini (27), Huertas (6), S. Rodríguez (4), Sastre, Wiltjer (3) y Borg.

Parciales 12-11, 14-16, 21-18 y 22-20.

Árbitros Cortés, Manuel y Sánchez.

Pabellón Palau Blaugrana (5.835 espectadores).

- El Barça sacó ayer adelante un complicado partido ante el Lenovo Tenerife (69-65) para mantener su diferencia al frente de la Liga ACB, aunque no disipó sus dudas frente a un rival que tuvo en Gio Shermadini (27 puntos, 37 valoración) a su faro en ataque.

El partido fue un ejercicio defensivo entre dos equipos que tuvieron desviada su puntería y que se decidió por pequeños detalles, seguramente por la energía de Laprovittola, Kuric y, sobre todo, Brandon Davies, en los momentos calientes del partido.

En el cuarto final, todos los balones de los exteriores de Tenerife iban para Shermadini, imparable en la pintura. El Barça empezó a acertar desde lejos y las tornas cambiaron. Se fueron los azulgranas hasta el 60-51, pero acabaron sufriendo.

A 30 segundos del desenlace, Rodríguez puso el 67-65 y Davies, tras una gran asistencia de Laprovittola, cerró el partido (69-65), un triunfo que le da oxígeno en la ACB después de dos derrotas consecutivas y que le permite pensar en las dos grandes batallas que tendrá esta semana en la Euroliga, en casa del Bayern de Múnich.

El Real Madrid, por su parte, también hizo los deberes en Sevilla gracias a un triple del escolta húngaro Adam Hanga a falta de 26 segundos decidió el encuentro (69-71) y que sirve a los de Pablo Laso para consolidar la segunda plaza en la Liga Endesa, mientras que el Coosur Betis Betis a los puestos de descenso que había abandonado momentáneamente tras ganar tres partidos consecutivos.

Los béticos bombardearon al combinado merengue desde el perímetro durante la primera mitad y, de hecho, llegaron al descanso con una para nada desdeñable renta de 36-27, que ponía contra las cuerdas a un Real Madrid espeso y con el cansancio acumulado de la eliminatoria de Euroliga contra el Maccabi. Tras el descanso, gracias en parte a la cuarta falta de Vitto Brown, lograron reducir su desventaja, igualaron el choque y, a pesar de que Brown puso por delante a los suyos dentro del último minuto, Hanga clavó un triple a falta de 26 segundos (69-70) y Tavares, tras taponar a Brown, selló el choque con un último tiro libre.