El Vithas Gaztedi dio el pasado sábado un paso importante hacia la salvación tras imponerse a domicilio a un rival directo como el Bera Bera. El equipo vitoriano se mostró muy sólido en el Miniestadio de Anoeta y terminó llevándose la victoria por un contundente marcador (10-41) tras dominar de principio fin y mejorar su rendimiento especialmente en la segunda mitad.
Los pupilos dirigidos por Miguel Beltrán de Otalora eran conscientes de que no podían fallar en este comienzo de la segunda fase de la División de Honor B de rugby y, por ello, mostraron una gran concentración durante los 80 minutos. Los guipuzcoanos estuvieron a remolque desde el primer golpe de castigo y ensayo de los gasteiztarras, obra de Josu Carrillo y Andrés Díez en los minutos 2 y 30, respectivamente.
Tras el intermedio, tres nuevos ensayos a cargo del sudafricano Winrey Stoffels -uno de los mejores del Gaztedi- y las posteriores transformaciones de Carrillo ensancharon todavía más la renta para un Gaztedi que vivió un plácido final de encuentro. El único ensayo del Bera Bera se produjo en los minutos de la basura cuando los visitantes perdieron algo de concentración.
En definitiva, un inmejorable resultado para un Gaztedi que, sin embargo, todavía debe refrendar su mejoría en las próximas semanas para certificar el objetivo de la salvación. El conjunto alavés se encuentra inmerso en esta segunda fase junto a otros ochos equipos, de los cuales uno descenderá de forma directa. Todavía le restan cuatro partidos fuera de Gamarra y tres en casa para dar por finalizada la temporada.