El estadio Benito Villamarín ha sido clausurado dos partidos por el Juez de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) después del suceso ocurrido en el derbi copero del pasado sábado, cuando un aficionado local lanzó un palo de plástico al terreno de juego e impactó en el jugador del Sevilla Joan Jordán.
"El Juez de Competición de la RFEF determina la clausura total de las instalaciones deportivas del Real Betis Balompié durante dos partidos. El Real Betis jugará en otro recinto que reúna las condiciones que establece el ordenamiento federativo", informó la Federación este miércoles en una nota de prensa.
Además, la RFEF considera "probado" que "a la vista de los hechos contemplados constatados en el presente expediente", las medidas tomadas por el Real Betis Balompié, para la prevención de incidentes de público "se han mostrado insuficientes".
El Juez Disciplinario del Comité de Competición considera que "no pueden aplicarse otras sanciones tales como la de pérdida de puestos o puestos en la clasificación (apartado 5) puesto que el formato de la competición se desarrolla mediante el sistema de eliminatorias".
Además, según el reglamento, "la sanción aplicable a la infracción disciplinaria cometida por el Real Betis Balompié sería la de clausura total o parcial del recinto deportivo de hasta tres partidos, o de dos meses".
Sin embargo, este órgano "considera adecuada y proporcionada la imposición de la sanción de clausura total en su grado medio", indica la resolución tras anunciar los dos partidos. El Betis tiene un plazo de diez días para interponer un recurso si lo considera oportuno ante el Comité de Apelación de la RFEF.
El partido entre Betis y Sevilla, correspondiente a los octavos de final de la Copa del Rey, se reanudó un día después y finalizó con triunfo de los verdiblancos por 2-1 gracias a los goles de Nabil Fekir y Sergio Canales.