MANCHA REAL Lopito, Raúl Pérez (Chumilla, m.78), Óscar Quesada (Mario Ordóñez, m.73), Pedro Corral (Pablo Siles, m.57), Juanma Espinosa, José Enrique, Urko Arroyo (Pablo Siles, m.53), Mauro, Rafa Vega, Nando (Del Amo, m.70) y Carlos Jiménez.

ATHLETIC Aguirrezabala, Petxarromán (Balenziaga, m.64), Íñigo Martínez, Vesga, Berenger (Sancet, m.64), Vivián, Lekue, Raúl García (Artola, m.77), Noloskain (Dani García, m.70), Nico Williams (Zárraga, m.70) y Nico Serrano.

Goles 0-1, m.20: Nico Williams. 0-2, m.44: Nico Williams

Árbitro Juan Martínez Munuera (Comité Valenciano).

Estadio La Juventud de Mancha Real con unos 4.000 espectadores

- El Athletic Club de Bilbao, con dos goles de Nico Williams, una de las nuevas perlas de la cantera de Lezama, acabó con el sueño del Atlético Mancha Real en la Copa del Rey y selló su pase a los octavos de final al ganar por 0-2 en la localidad jiennense.

El menor de los hermanos Williams ofreció un recital de juego y efectividad en la primera parte con un gol tras un rechace del meta Lopito y otro con una definición perfecta tras un control orientado, con lo que sentenció el partido y la eliminatoria en los minutos 20 y 44.

Además, pudo marcar un tercero en un remate que describió una parábola y se estrelló en el larguero, todo ello en una primera mitad en el que el equipo que entrena Marcelino García Toral superó al único representante de Segunda RFEF que quedaba en la competición.

El técnico, que volvió a sentarse en el banquillo tras la covid-19, presentó un equipo de garantías para tratar de pasar la eliminatoria e, incluso, a diferencia del Real Madrid y el Barcelona, no tuvo que recurrir a sus estrellas, Unai Simón, que no fue convocado, e Iñaki Williams y Muniáin, que se quedaron en el banquillo.

El Atlético Mancha Real apenas inquietó durante los 90 minutos y no generó ocasiones, aunque cayó con dignidad.

Marcelino García Toral, entrenador del Athletic Club de Bilbao, elogió el partido de sus jugadores en la victoria por 0-2 ante el Atlético Mancha Real, que le permitió clasificarse para los octavos de final de la Copa del Rey gracias a su actitud sobre el campo desde el primer minuto.

“El equipo desde el primer momento fue a por el partido, porque jugamos con mucho dinamismo e intensidad durante los 90 minutos”, destacó el técnico, que se sentó en el banquillo tras recuperarse de la COVID-19.

Además, el asturiano, que el pasado año ganó la Supercopa de España y fue finalista de la Copa del Rey, admitió las dificultades del partido por la motivación del rival: “A este partido le teníamos mucho respeto, porque el Atlético Mancha Real venía de eliminar al Granada y tiene un equipo con buenos jugadores. Al Atlético Mancha Real le deseo todo lo mejor para la Liga y deben estar muy satisfechos con el torneo que han realizado en la Copa del Rey”, finalizó.