- Hasta Jon Rahm tuvo que rendirse a la evidencia de lo que ya sabía: Valderrama no perdona. El número 1 del mundo acabó su primera ronda del Andalucía Masters con 78 golpes, un siete bajo par realmente llamativo, tanto que en la segunda peor vuelta de su carrera como profesional, igualada con la que firmó en The Open en 2018. La peor fue en The Players en 2017, un 82 hace más de cuatro años. En esas ocasiones, el golfista de Barrika perdió el corte y ahora también corre el riesgo de quedarse fuera del fin de semana en el exigente recorrido gaditano. "Ha salido todo mal, aunque quiero seguir en el torneo, obviamente. No tengo margen de error, pero lo veo factible", comentó Rahm, que necesitará hoy una vuelta rondando el par para tener opciones de avanzar.
Puede ser suficiente porque ayer solo diez jugadores pudieron acabar por debajo del par, un registro que en Valderrama, donde la paciencia y la prudencia en la elección de golpes son virtudes a explotar, sabe a gloria. El vizcaino se encontró con un viento que complicó mucho su juego, aunque no quiso escudarse en eso porque "el único culpable de lo que ha pasado he sido yo". Jon Rahm apenas cogió calles y así es muy difícil robar golpes a Valderrama, que pone todo tipo de trampas y dificulta al máximo los golpes de aproximación. Su bola aterrizó pocas veces a distancia de birdie alrededor de las banderas, casi siempre más allá de los tres metros, y tampoco logró aprovechar las escasas oportunidades que tuvo. Y es tan duro como el resultado final es que acabó el día sin lograr un solo birdie, lo que le condenó a las profundidades de la clasificación.
Empezando por el 10, ya iba cuatro sobre par en el 15 y cerró los primeros nueve hoyos con un doble bogey en el 18. De ahí al final, fue pura supervivencia e intentar rascarle algo al campo. "Estoy contento por no haber tirado la vuelta después de un resultado tan alto. Haber salvado dos o tres golpes pueden servirme al final para estar dentro del corte el viernes", aseguró Jon Rahm, que vio cómo a su lado Rafa Cabrera Bello mantenía el buen tono mostrado en Madrid y cerraba en tres bajo par. El líder con cuatro bajo par es el galo Jelien Guerrier, que fue tercero en el Open de España y sigue en esa ola de confianza.
Por su parte, Adrián Otaegui salvó el día y acabó con una vuelta de dos golpes sobre par después de hacer dos birdies y cuatro bogeys que le dejan con muchas posibilidades de progresar de cara al fin de semana.
Primera jornada