lega el segundo día de descanso. Ya hemos finalizado la segunda semana de competición de la Vuelta, un tramo muy duro para mí. Personalmente tengo muchas ganas de ir hacia el norte. Ha sido una semana muy exigente. No me he sentido bien sobre la bici. En ningún momento he encontrado buenas sensaciones. Lo he pasado realmente mal con tanto calor. Espero que me siente bien el día de descanso y que el cuerpo, con temperaturas más bajas, responda mejor y se reencuentre con el estado de forma que tenía al comenzar la carrera o que, al menos, me aproxime a ello. Camino de El Barraco lo hemos intentado con Maté y Soto. Han estado muchos kilómetros en cabeza, pero ese grupo no ha prosperado finalmente. El comienzo ha sido una auténtica guerra. Una locura. La escapada definitiva se ha hecho más tarde, con gente de muchísima calidad. De ahí ha salido el ganador de la jornada. Rafal Majka ha completado una exhibición para ganar en El Barraco tras recorrer muchísimos kilómetros en soledad. Por detrás, los favoritos, si exceptuamos los 15 segundos logrados por Yates, han llegado juntos a pesar de ser una jornada de muchísimo desgaste. Las fuerzas están muy justas y todos miden sus movimientos. Todo queda a expensas de la última semana, donde la etapa con el final en Lagos de Covadonga y la que concluye en el Gamoniteiru deberían servir para hacer grandes diferencias en la general. Luego solo quedará la crono final en Santiago de Compostela.