- Permitid que por un momento nos apropiemos de la tan mítica frase del himno del Liverpool, You'll Never Walk Alone para hacer referencia a las Gloriosas, quienes este domingo a las 12.00 horas se jugarán, en el Centro Deportivo Wanda ante el Atlético de Madrid B, el ascenso a la máxima categoría del fútbol femenino.

Una situación que bien podría decirse que no es nueva para un conjunto que ha tenido el ascenso en sus manos en alguna que otra ocasión como bien recuerdan los aficionados, pero que no ha hecho tambalear un proyecto que no para de crecer y que se encuentra ante uno de los puntos más importantes de su historia.

En este momento tan crucial, el Deportivo Alavés no estará solo, ya que sus fieles seguidores viajarán hasta Madrid para animar durante todo el partido a las Gloriosas. Para nada importa el varapalo recibido hace dos semanas en Ibaia, donde el público animó sin parar desde la valla del camping de Ibaia quedándose con la miel en los labios tras la derrota ante el Real Oviedo (1-2). "Vivimos el encuentro con nervios y pasión como siempre, pero al final somos del Deportivo Alavés y el sufrimiento está siempre con nosotros", comenta Yarovit Sixto.

Es más, la derrota sólo ha dado más ganas a los aficionados para apoyar con más energía que nunca a un equipo que se encuentra preparado para la batalla. Como bien expresa Nerea Celada, "sufrimos bastante, las jugadoras se merecen más que nadie este ascenso y el hecho de poder celebrarlo en Ibaia ilusionaba mucho. Por suerte tenemos otra oportunidad el domingo, y ahí estaremos con ellas".

Por su parte, Julen Bilbao estaba preparado junto a su familia para una celebración doble, ya que "estábamos festejando el cumpleaños de Ainara y estuvimos viendo el partido en el móvil, y aunque la mañana empezó alegre, terminó siendo un poco funeral".

Sin embargo, ningún aficionado pierde la fe en las Gloriosas, como bien recalca la familia (Ainara, Peio y Julen). "Vamos a Madrid con la intención de celebrar allí lo que no pudimos festejar en Ibaia". Un viaje que a buen seguro será apasionante tanto para los aficionados como para el Deportivo Alavés, que se encontrará bien arropado. "Viajaremos el sábado por la mañana a Alcalá de Henares para disfrutar el fin de semana allí y el domingo apoyaremos sin descanso a las jugadoras", advierte convencida Nerea.

Aficionados animando a las Gloriosas

Aficionados animando a las Gloriosas

sorpresas previstas La afición albiazul está ya identificada como una de las mejores y no solo por no desfallecer nunca, sino porque siempre tiene un as bajo la manga. "Viajaremos a Madrid, en principio, sin ninguna sorpresa, pero durante el desplazamiento es posible que algo surja", augura Yarovit. Eso sí, los que no pasarán desapercibidos a buen seguro serán la familia Bilbao, quienes tienen organizado todo al detalle. "Nuestra expedición va cargada con las camisetas de las Gloriosas con el número 21 y nuestros respectivos nombres. A eso hay que sumarle nuestras ganas e ilusión y un bombo y un megáfono".Ningún aficionado desea echar la vista atrás y nadie quiere pensar en posibles viejos fantasmas, como Nerea, quien estuvo presente en El Sadar. "No tengo ninguna duda de la victoria y es gracias a la confianza que transmiten las jugadoras en cada partido. Todos tenemos claro que este año sí que toca y así será".

Julen va en la misma línea y solo quiere mirar al futuro. "Borramos esos malos recuerdos de nuestras cabezas y ahora solo estamos centrados en animar, alentar y en llevar en volandas al grupo hasta el ascenso". Un logro que Yarovit lo tiene claro, "la historia será distinta, el fútbol nos la tiene que devolver", al mismo tiempo que comenta que "además de toda la calidad que demuestran tener, son como una familia y eso es fruto de muchos años de trabajo".

El Deportivo Alavés femenino puede enorgullecerse de muchas cosas, pero el mejor ejemplo de su buen trabajo está en la afición. Prueba de ello es que cada año tiene más seguidores. Un trabajo que se ha hecho paso a paso, con sudor y trabajo, y eso los aficionados lo han percibido para recompensarlo con todo el cariño del mundo, como Nerea que las admira con todo su corazón. "Su entrega en cada partido, su ambición de querer siempre más, su capacidad de superación ante cualquier obstáculo y lo cercanas que son fuera del campo".

con los pies en el suelo Yarovit también se emociona al hablar al respecto, por el simple hecho de que además de que "salen a dejarse el alma por este escudo, a los que vamos cada día a Ibaia nos valoran un montón, se acuerdan de nosotros, cosa que no todos lo hacen y eso es para tenerlo en cuenta". Julen, Ainara y Peio definen su fervor por las Gloriosas como si de una relación de amor fuera, porque "su carácter, cercanía y entrega ha hecho que nos hayamos enamorado de ellas".

Todos los aficionados tienen los pies en el suelo y más después de haber vivido la derrota de hace dos semanas en Ibaia, pero aun así es imposible no pensar en un posible festejo tras una hipotética victoria gasteiztarra. Por ejemplo, Yarovit es consciente de lo que significa el ascenso, "algo que no se consigue todos los días y que para la gente que llevamos siguiendo al equipo desde su creación, esto significaría mucho y lo celebraremos de una manera especial".

Por su parte, los tres miembros de la familia Bilbao cogen aire al pensar al respecto, porque "ahora mismo podríamos decir que vamos a reír, llorar, saltar o cantar, pero la verdad es que cuando llegue el momento, nos dejaremos llevar".

En definitiva, hay quien dice que el trabajo siempre es recompensado y las albiazules lo podrán comprobar este domingo en el Centro Deportivo Wanda. Pase lo que pase, su gente no les abandonará en la cita más importante del año. Vitoria acompañará a las Gloriosas en la última jornada para que no caminen solas en esta recta final, donde solo falta un paso para la gloria.