La Copa estuvo a punto de deparar otro disgusto a un grande. El Cornellá, que ya se había cargado al Atlético, llevó a la prórroga a un Barça que había marrado dos penaltis. Recién arrancada la primera parte del tiempo extra, Dembelé sofocó el sufrimiento blaugrana y en el 120 Braithwaite confirmó el pase del Barça a octavos.