- Hace poco más de un año la Juventus tomaba una decisión revolucionaria para su historia al destituir a Massimiliano Allegri, símbolo de un fútbol sólido y práctico, para apostar por el buen juego de Maurizio Sarri. Un proyecto que, sin embargo, nunca funcionó y que llegó a su fin ayer con la destitución del técnico tras el fracaso en los octavos de final de la Champions League contra el Lyon y pese a ganar la Serie A. Por sorpresa, el club comunicó en tiempo récord el nombre de su sustituto: la perla Andrea Pirlo. Un hombre que lo ha sido todo como jugador en el fútbol italiano, exquisito, pero que toma las riendas del trasatlántico neroazzurro sin haber entrenado a nadie aún en sus 41 años de vida.