- La pandemia del coronavirus lo cambió todo, confinó al mundo, frenó el progreso y detuvo el tiempo. Aplazó citas, canceló planes y suspendió proyectos. Rompió los hábitos y alteró la rutina. Estancó la vida y también el fútbol, frenado de sopetón. Pero tres meses después el balón está a punto de rodar. Estadios con las gradas vacías, celebraciones contenidas, mascarillas en la banda y también caras nuevas. Futbolistas arrinconados por cualquier lesión que renacen ahora y llegan a tiempo.

La Liga de las estrellas recupera a sus astros. El tiempo ha corrido a favor de futbolistas marginados que ahora llegan a tiempo al tren en marcha de la Liga. Es la hora de Eden Hazard, Marco Asensio, Luis Suárez, Maxi Gómez, Arthur Melo, Morata, Illarramendi o de Tomás Pina. Algunos de los que, entre muchos, tienen un papel reservado en el desenlace del curso y un hueco en el escenario.

Luis Suárez fue operado en enero pasado de una lesión de menisco en la rodilla derecha. Al menos, cuatro meses de recuperación. Quique Setién ya cuenta con sus goles para que el Barça pueda revalidar el título liguero. El delantero es el principal refuerzo del Barcelona, pero también se han puesto a punto Arthur y Sergi Roberto, aunque no Dembelé, dado de baja para poder fichar a Braithwaite.

Hazard despierta de su pesadilla. El belga se había despedido del curso tras ser intervenido de una fisura en el peroné distal derecho. Había dado carpetazo a la temporada y ahora es el gran refuerzo de Zidane, igual que Marco Asensio inédito durante todo el año por una rotura del ligamento cruzado en la rodilla izquierda.

El Atlético Madrid ha tenido que asumir la baja provisional del portugués Joao Félix, que puede perderse alguna de las primeras jornadas a causa de un esguince del ligamento. El Valencia era el equipo más castigado por las lesiones en marzo, cuando la Liga se detuvo. Llegará a tiempo el uruguayo Maxi Gómez, con una fractura del metatarsiano de su pie izquierdo. Dos meses de baja que ya han pasado. Incluso el lateral Cristiano Piccini puede participar en los últimos partidos de la temporada.

Después de operarse el pasado 15 de diciembre con un pronóstico de tres meses de recuperación, el alavés Óscar de Marcos ya mira hacia su reaparición con el Athletic, que ha perdido definitivamente a Aritz Aduriz. Y la Real recupera a Asier Illarramendi, que jugó por última vez el pasado 30 de agosto, restablecido de la grave lesión en el peroné que le ha tenido ocho meses fuera de la actividad.

El Deportivo Alavés, por su parte, recupera a Tomás Pina, quien daba la temporada por perdida tras sufrir en diciembre una fractura de peroné y que ahora tendrá la oportunidad de jugar de nuevo.