- El Bahrain McLaren que levantó el vuelo esta campaña con la incorporación de Mikel Landa, como líder único de la escuadra, y la de Pello Bilbao, entre otros, a modo de rutilante fichaje, se construyó con la firme intención de derrocar la dictadura del Ineos, antiguo Sky, en el Tour de Francia. El desembarco de la factoría de bólidos en el accionariado del equipo pretendía dotar de potencia extra a la formación que comparte el corazón británico del Ineos. También a uno de sus ideólogos, Rod Ellingworth, mánager general de la estructura y que en su día fuera uno de los creadores del Sky. La idea fuerza de Ellingworth, la de superar al Ineos, estaba en plena vigencia hasta que asomó un enemigo inesperado: el coronavirus. El gigante invisible.

Ante la situación creada por la pandemia del covid-19, y para salvaguardar la viabilidad económica del proyecto, el equipo británico reducirá un 70% el sueldo de todo su plantel durante los meses de marzo, abril y mayo. Como contrapartida a esta salvaje reducción de salario, Bahrain McLaren tendría la intención de abonar íntegramente las fichas de los corredores en caso de que la competición se reanude dentro de cierta normalidad según ha podido saber DNA. “Hemos decidido que tanto yo como otros altos directivos renunciemos a nuestros salarios durante tres meses”, expuso Ellingworth que añadió “estamos recortando un porcentaje de todos los salarios y el personal para el mismo periodo”.

El patógeno se muestra inclemente en su avance y no deja de aniquilar voluntades. Con buena parte del mundo sumido en una alerta sanitaria de la que se desconoce su coste final, el ciclismo sacó el pie de la cala por el hostigamiento del covid-19. En esa situación de hibernación, apagada la competición, sin ingresos y con los ciclistas enroscados al rodillo, comenzó el goteo de decisiones económicas para proteger la salud financiera de los equipos. Lotto anunció la rebaja del 10% del salario de su plantilla y Astana subió la apuesta hasta el 30% de reducción para los meses de marzo, abril y mayo.